Es la voz femenina que a todo el mundo le viene a la cabeza cuando piensa en la bossa nova, y se acaba de apagar. La cantante brasileña Astrud Gilberto, la intérprete de 'The Girl from Ipanema', la conocidísima versión en inglés de 'Garota de Ipanema', murió anoche a los 83 años en Salvador de Bahía, su ciudad natal, según ha informado su nieta y también cantante Sofía Gilberto en su perfil de la red social Instagram. "Vengo a traer la triste noticia de que mi abuela se convirtió hoy en estrella y está al lado de mi abuelo João Gilberto", ha afirmado.
La canción original fue compuesta en 1962 por dos de los padres fundadores de aquel género nuevo surgido en los años sesenta que combinaba samba, jazz y pop: Vinícius de Moraes escribió la letra y Antônio Carlos Jobim, la música. Un año después fue grabada para la discográfica Verve, uno de los sellos más importantes del jazz, por el saxofonista estadounidense Stan Getz y el guitarrista y cantante João Gilberto, otro pionero de la bossa nova, marido de Astrud Weinert (ese era su apellido de soltera), y el acompañamiento de Jobim al piano.
Nacida en 1940, la voz de Astrud Gilberto ha llegado a millones de personas en todo el mundo por casualidad. Ella no tenía vinculación con el mundo de la música, pero cuando su marido estaba grabando el disco Getz/Gilberto con Stan Getz y Tom Jobim en Nueva York en 1963 —ella tenía 22 años—, él le pidió que grabara unas estrofas para la canción. Aunque no tenía experiencia previa en el mundo de la música, su voz inocente y aterciopelada gustó mucho, aunque no apareció en los créditos de la primera edición del disco.
Pocos años después, Astrud se divorció de João, aunque conservó el apellido Gilberto. El éxito descomunal del disco Getz/Gilberto catapultó su carrera musical, y se convirtió en una de las intérpretes más conocidas de aquella edad dorada de la música brasileña. Llegó a colaborar con Chet Baker, Ennio Morricone y George Michael, entre otras muchas figuras internacionales del mundo de la música, y en los años 70 empezó a escribir sus propias canciones.
Astrud Gilberto, que además de cantante era pintora, recibió el premio Latin Jazz USA Award en reconocimiento a toda su carrera y en 2002 ingresó en el International Latin Music Hall of Fame.