El cantante y compositor Joan Manuel Serrat ha sido galardonado con el Premio Princesa de Asturias de las Artes 2024, según ha hecho público hoy en Oviedo el jurado encargado de su concesión.
"No saben con cuánta alegría y emoción recibo la noticia de la concesión del premio", ha manifestado Serrat en un comunicado. "No encuentro mejor manera que una distinción tan prestigiosa como esta para despedir una carrera profesional larga y satisfactoria como la mía".
El jurado ha premiado al autor de Mediterráneo "por el alcance de una trayectoria artística que trasciende la música y se hace referente cívico, sumando a las letras de sus canciones la fuerza del himno colectivo con voluntad universal".
"En el trabajo de Serrat, de honda raíz mediterránea, se aúna el arte de la poesía y la música al servicio de la tolerancia, los valores compartidos, la riqueza de la diversidad de lenguas y culturas, así como un necesario afán de libertad", continúa el acta del jurado.
"Defensor del diálogo frente a la crispación, la obra de Joan Manuel Serrat es un exponente de su irrenunciable vocación de tender puentes entre países y generaciones", concluía el acta.
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Nacido un 27 de diciembre de 1943, el 'noi de Poble-sec' abandonó los escenarios el 23 de diciembre de 2022, más de cincuenta años después de que el grupo barcelonés Els Setze Jutges lo integrara en sus filas a comienzos de los años 60. Eran los años de la eclosión de la nova cançó catalana, movimiento que impulsó la música en catalán y reivindicó su lengua y su cultura en pleno franquismo.
Serrat creció en el humilde Poble-sec, donde la gente trabajadora sobrevivía en torno al puerto pesquero. El Noi ha reivindicado más de una vez su condición de charnego. Su madre, Ángeles, era aragonesa, de Belchite: de ella heredó el gusto por la zarzuela y la copla de Juanito Valderrama o Concha Piquer, las letras de Quintero, León y Quiroga. Quizás por ello en su cante se atisbe un sutilísimo deje flamenco. Su padre, Josep, fue un anarquista catalán afiliado a la CNT.
Licenciado en Ingeniería Técnica Agrícola, fue en su etapa universitaria cuando comenzó a tener mayor contacto con el mundo de la música. En 1964 grabó su primer disco en solitario, Una guitarra, y se estrenó como intérprete en 1965. Solo un año más tarde protagonizó su primer recital en solitario en el Palau de la Música de Barcelona. En 1966 publicó Ara que tinc vint anys y Cançó de matinada, con los que alcanzó los primeros puestos de las listas de éxitos en España.
Serrat es la voz de la concordia. Sin embargo, su trayectoria hasta llegar a conciliar a casi todos no fue, precisamente, un camino de rosas. En 1968 fue elegido para representar a España en Eurovisión, pero se vio envuelto en una sonora polémica por la canción "La, la, la", compuesta por El Dúo Dinámico.
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Le ofrecieron interpretarla en Eurovisión y, motivado por las críticas de sus camaradas catalanes, exigiría cantarla en su lengua. Aquella intemperancia le valió el veto en TVE, que se prolongó hasta 1974. El régimen franquista inició una campaña en su contra y en 1975 tuvo que exiliarse en América Latina por criticar a la dictadura.
Aunque vilipendiado en España por cantar en catalán, y en Cataluña —de esto no hace tanto— por hacerlo en castellano, en su despedida recibió el abrazo unánime y emocionado de sus seguidores. Desde entonces, su figura no solo atraviesa las ideologías enfrentadas, sino que trasciende la sucesión de generaciones. Su obra, escrita en catalán y en español, fue acogida con idéntico entusiasmo en América Latina.
Serrat y la poesía
Conocido también por sus adaptaciones de poemas, el gran éxito fue el disco Dedicado a Antonio Machado, poeta (1969). Las grandes compañías, que ya custodiaban la carrera de una estrella pop, no consideraron rentable la producción de un álbum en homenaje a un poeta, pero él se mostró incorruptible con la industria hasta el final de su vida. Finalmente, fue un éxito de ventas, pero "no tuvo una recepción por parte de la cátedra de lo más halagüeña", dijo Serrat el 26 de julio del año 2000, cuando recogió el I Premio Internacional Audiovisual Antonio Machado en Sevilla.
El homenaje a Machado en forma de disco es la cumbre de popularidad más alta que ha alcanzado la poesía española. No hay ciudadano que piense en el verso "Caminante no hay camino" sin la melodía vocal al fondo. El mismo álbum contiene "La saeta", que le permitió reunirse presencialmente con el cantaor flamenco Camarón, un año antes de su muerte, para la interpretación simultánea.
Miguel Hernández fue publicado en 1972. Serrat ha confesado siempre que la conexión personal con el poeta de Orihuela es aún más intensa que con el autor de Campos de Castilla. Este disco contiene la inolvidable "Nanas de la cebolla", con música de Alberto Cortez, y la majestuosa "Para la libertad" (otro verso en boca de todos).
Tras musicar a Machado, a Hernández y al catalán Joan Savat-Papasseit en Serrat / 4 (1970) —más tarde incorporaría versos de otros poetas como Luis Cernuda, Lorca o Eduardo Galeano a sus canciones—, el cantautor barcelonés realizaría la primera incursión en un poeta entonces vivo. Mario Benedetti participó en la creación de El sur también existe (1972), título extraído del poema del uruguayo, que supone un canto de amor a América Latina.
Algunos discos como Mediterráneo, En tránsito, Cada loco con su tema, Utopía, Banda sonora d’un temps, d’un país o Mi niñez ya son parte inseparable de la memoria sentimental española desde la segunda mitad del siglo XX.
En los últimos años de su carrera estuvo muy ligado a Joaquín Sabina. Cultivan una amistad que se remonta mucho tiempo atrás, pero la enfermedad de uno y otro —Serrat padeció cáncer y Sabina, un ictus— les unió definitivamente. En 2007 se encontraron, pasada la tormenta, con la clara voluntad de celebrar la vida. La gira Dos pájaros de un tiro fue un verdadero gozo para sus seguidores y tendría algunas réplicas en años posteriores.
Un elenco con más de diez músicos (compartidos entre las bandas de uno y otro) acompañaron las mejores canciones de los dos grandes autores españoles. Hasta 60 personas formaron parte de la aventura. Rancheras, rumbas, baladas, rock and roll… Un repertorio con todo tipo de géneros y estilos, un tour que se prolongó en tres ocasiones. La última, justo antes de la pandemia, tuvo como fatal desenlace la caída de Sabina al foso del escenario durante una actuación en el WiZink Center.
La trayectoria de Serrat se caracterizado también por su compromiso y defensa de la democracia y los derechos humanos. En 1978 apoyó sin reservas la Constitución Española y en las décadas de los setenta y los ochenta se convirtió en un símbolo en muchos países de Iberoamérica, no solo por su calidad artística, sino también por su compromiso frente a la dictaduras y regímenes dictatoriales militares. En los últimos años se ha mostrado muy crítico con la deriva tomada por el independentismo catalán y ha criticado duramente la convocatoria del referéndum del 1 de octubre de 2017.
El idilio con América Latina
El idilio con América Latina se remonta a 1968, cuando realizó su primer viaje tras la polémica de Eurovisión. Augusto Algueró, que lo había invitado a cantar "Penélope", lo acoge en el Festival de la Canción de Río de Janeiro. Más tarde se desplazó a Buenos Aires, cuando en Argentina gobernaba Juan Carlos Onganía, predecesor de Rafael Videla. Allí se encuentra con el escritor y dramaturgo Max Aub y el cineasta Luis Buñuel, que permanecen exiliados.
A Cuba viaja en 1971, cuando el espíritu del Che Guevara planeaba sobre la Isla, solo cuatro años después de ser asesinado en Bolivia. Fue detenido en el Malecón de La Habana por llevar el pelo largo, pero se llevó consigo amistades eternas: la del recientemente fallecido Pablo Milanés y la de Silvio Rodríguez, entre otras.
Doctor honoris causa por varias universidades españolas e iberoamericanas, Serrat ha sido condecorado, además de en España, en Venezuela, Argentina, Francia, Colombia, Chile, Ecuador, Uruguay, Perú y México. Medalla de Oro en las Bellas Artes (1994) y al Mérito en el Trabajo (2006) de España, ha sido reconocido con la insignia de la Orden de Águila Azteca de México (2010) y la Gran Cruz de la Orden Civil de Alfonso X el Sabio del Gobierno de España (2022).
Entre otras distinciones, ha recibido el Premio Nacional de Músicas Actuales (2010), el Grammy Latino a la persona del año (2014) y el Premio Odeón de Honor (España, 2022). En 2023 fue nombrado Hijo Adoptivo de Orihuela y recibió el Premio Abogados de Atocha por su defensa de los derechos humanos.
El jurado del Premio Princesa de Asturias de las Artes 2024 ha estado integrado por Claude Bussac, Josep Maria Flotats i Picas, Sergio Gutiérrez Sánchez, Maribel López Zambrana, Antonio Lucas Herrero, Joan Matabosch Grifoll, Isabel Muñoz Villalonga, María Pagés Madrigal, Helena Pimenta Hernández, Martha Thorne, Rosa Torres-Pardo y Carlos Urroz Arancibia, presidido por Miguel Zugaza Miranda y actuando de secretaria Sandra Rotondo Urcola. La candidatura ha sido propuesta por Antonio Gutiérrez Vegara, exsecretario general de CC.OO.
"Quisiera agradecer al jurado el haber valorado tan generosamente mis méritos y también dar las gracias a todos aquellos que en esta ocasión y en otras anteriores propusieron unir mi nombre a la lista de galardonados por este Premio”, declaraba Serrat en el comunicado que ha hecho público.
Este ha sido el primero de los ocho Premios Princesa de Asturias que se conceden este año, cuando se cumple su cuadragésima cuarta edición. En los próximos días se fallarán los correspondientes a Comunicación y Humanidades, Deportes, Ciencias Sociales, Letras, Cooperación Internacional, Investigación Científica y Técnica y Concordia.
El acto de entrega de los Premios Princesa de Asturias se celebrará, como es tradicional, en el mes de octubre en una solemne ceremonia presidida por los Reyes de España, acompañados por la Princesa de Asturias y la Infanta doña Sofía.