Franz Schubert: "Los últimos cuartetos".
Estos jóvenes músicos americanos resaltan ante todo el aspecto contrapuntístico de estas partituras, con especial realce de la cuerda grave, mientras el componente lírico actúa como un remanso frente a la tensión dramática de las lecturas.Es una visión de gran modernidad, comparable a la que en su día hiciera el Cuarteto LaSalle de los últimos cuartetos beethovenianos. La técnica de los instrumentistas es prodigiosa, y el sonido de que hacen gala, aunque no se erige en lo primordial, es de una gran calidad, realzado por una estupenda grabación.