Jacques Offenbach: "Orfeo en los infiernos".
Natalie Dessay es una deliciosa Eurídice, que sabe trufar de gracia, y aun de gracejo, un canto que, por lo demás, es perfectamente ortodoxo en lo técnico. Resuelve las coloraturas del número final con eficacia tanto cómica como musical. Para la Opinión Pública se cuenta con el sin par timbre de la contralto Ewa Podles. Patricia Petibon está adorable en Cupido y todo el resto del reparto está, como mínimo, a la altura de las circunstancias. En las escenas dialogadas abunda el exceso de énfasis, pero eso es un inconveniente menor. No nos engañemos, hablamos de opereta y no de alto teatro. No hay que perder esta ocasión de disfrutar.