Discos

Del veinte al veintiuno

28 febrero, 1999 01:00

Encuentro muchos motivos para saludar con alborozo esta iniciativa de Deutsche Gramophon. Visto el producto desde fuera, impresiona el diseño y la presentación. El aspecto es nuevo, sin dejar de ser amarillo. Es música reciente, pero con sólo mirar los estuches apetece oírla. Las interpretaciones, por otra parte, son insuperables. Que el sello centenario dedique un esfuerzo de imaginación y promoción tan considerable a la música de nuestro tiempo es motivo de satisfacción. Más que por el producto en sí, por lo que significa de apuesta por el futuro. Quiero decir que DG es una empresa, algo obligado a ganar dinero. No sé si soy ingenuo, pero yo veo todo este lío del 20/21 como una apuesta de DG por la música de hoy. Sus mercadólogos habrán olisqueado buenos tiempos para la contemporánea y, como dicen los financieros, aconsejan tomar posiciones. Ojalá.
Entretanto, el proyecto 20/21 se presenta con cinco joyitas. Más que atractivas, son imprescindibles. Nada menos que todas las "Secuencias" de Luciano Berio, reunidas por primera vez en un álbum. Tres compactos con las 13 secuencias interpretadas por el Ensemble Intercontemporain. Luisa Castellani canta estupendamente la "Secuencia III". Demuestra que la gran Cathy Berberian no dejó cerrada del todo esta puerta. Está, además, la ópera "Un tranvía llamado deseo" de André Previn, grabada en vivo en septiembre pasado, cuando su estreno absoluto en San Francisco. No extrañará a nadie que Previn sea un eficacísimo compositor para el teatro, pero había que oírlo y comprobarlo. No es que invente mucho, pero hace cantar con naturalidad el inglés y pone elegantemente el drama en sonidos. Renée Fleming es una atractiva Blanche. Discos monográficos de Mauricio Kagel, Toru Takemitsu y Pierre Boulez (con "Repons" y "Dialogue de l"ombre double", que sonaron en 1992 en el Palacio de los Deportes de Madrid) completan este primer envío. Para la segunda hornada se anuncian piezas de Arvo Pärt tocadas por Gil Shaham, un disco Carter, mucho Henze y la primera grabación de la "Cantata de la Casa Blanca" de Bernstein. Sea apuesta de futuro o efímero presente, a este 20/21 lo recibimos con alegría. Como a los americanos.