Gabriel Fauré
De las grandes obras camerísticas de Fauré, las aquí registradas son, posiblemente, dos de las más sólidas de su autor, aunque no por ello de las más conocidas. El Segundo cuarteto con piano fue escrito por el compositor francés en plena madurez, y fue concluido en 1886, un año antes de su célebre Requiem. El Segundo quinteto para piano y cuerdas, por su parte, puede considerarse la cima de la obra de cámara de sus últimos años, y contiene un Adagio de dimensiones casi brucknerianas. Fue escrita entre 1919 y 1921, cuando el compositor estaba casi prácticamente sordo.
Los excelentes músicos que integran el Cuarteto Ysaÿe y el no menos magnífico pianista Pascal Rogé ofrecen unas interpretaciones que combinan con acierto la pasión y la delicadeza que dominan estas páginas, y cuentan con una espléndida toma de sonido. En suma, una estupenda ocasión para acercarse al fascinante y personalísimo mundo de este compositor francés tan insuficientemente conocido.
Los excelentes músicos que integran el Cuarteto Ysaÿe y el no menos magnífico pianista Pascal Rogé ofrecen unas interpretaciones que combinan con acierto la pasión y la delicadeza que dominan estas páginas, y cuentan con una espléndida toma de sonido. En suma, una estupenda ocasión para acercarse al fascinante y personalísimo mundo de este compositor francés tan insuficientemente conocido.
