De Aeternitate
J. M. Bach, J. C. Bach, Bernhard, Hasse, Reincken, Geist, Fischer, Spahn, Hoffmann
6 febrero, 2002 01:00El lanzamiento de una nueva casa discográfica es siempre un proyecto complejo y arriesgado, más aún con un mercado casi saturado de ofertas. Tal vez, en el caso de Mirare y de su creador, René Martin, este sea el lógico destino de algo que comenzó a fraguarse años atrás, en la Roque d’Anthéron, en la Folle Journée de Nantes o en la Abadía de Fontevraud, festivales dirigidos por este francés al que no le falta energía ni pasión en todo aquello que emprende.
A la luz de todas estas manifestaciones surgieron no pocos discos en firmas como Emi, Decca, Erato o Harmonia Mundi, por nombrar sólo unas cuantas. Así que es natural pensar que llegaría el momento en que el propio René Martin decidiera "hacer" esos discos según su criterio. Si debemos juzgar por el primero que sale al mercado, y que en España será distribuido por Diverdi, el comienzo no puede ser mejor. Desde el nombre del sello, Mirare, que en latín significa contemplar, mirar con embeleso, hasta la edición de los textos, todo está más que cuidado. La presentación es elegante, de gran belleza estética, y lo mismo sucede con el contenido. La música y los intérpretes se han elegido con sumo cuidado: la muerte y la eternidad como tema, compositores del barroco alemán como J. C. Bach, J. M. Bach, Bernhard, Hasse, Reincken, Geist, Fischer, Spahn o Hoffmann, música delicada, íntima y bellísima. Los intérpretes, un fantástico Ricercar Consort dirigido por Philippe Pierlot, uno de los mejores violagambistas de la actualidad, de una sensibilidad y de un instinto musical fuera de lo común, y Carlos Mena, nuestro contratenor más internacional, que está fantástico, expresivo, intenso y contenido a un tiempo, y con una espléndida articulación de los textos.