Canciones Negras y algo más
Resulta difícil que un compositor actual esté bien y suficientemente representado en la discografía. Las casas fonográficas suelen actuar sobre seguro, sobre lo que más vende. Son lo sellos más modestos y los institucionales los que más pueden hacer en pro de la difusión de estas músicas de nuestros días. Montsalvatge, que es sin duda ya un clásico en vida de la música española contemporánea, no es una excepción porque solamente llega a estar presente en soportes fonográficos una parte no grande de su obra, reunida en un catálogo que pasa con creces el centenar de títulos.
Canciones Negras
El primero y más solicitado son las famosas Canciones negras, ejemplo máximo de lo que se ha dado en llamar etapa antillana del compositor gerundense. Las cinco piezas que constituyen este grupo, selladas en su partitura original para voz y piano en 1945, nos revelan que hay bastante más que pintoresquismo en ellas. Ilustran poesías antillanas extraídas de un libro de Emilio Ballagas titulado Mapa de la poesía hispanoamericana. Hay algunas versiones señeras e inolvidables. La primera, que recoge el arreglo con orquesta, es de Victoria de Los ángeles con la Orquesta del Conservatorio de París y Fröhbeck de Burgos, integrada en un cd que contiene canciones de otros muchos autores como Mendelssohn, Grieg, Brahms, Hahn, Iradier, Chapí y Rodrigo (Emi M7 69502-2). Existe igualmente, por la misma soprano, una recreación de 1993 con la Orquesta Ciutat de Barcelona y García Navarro, que se completa con el Madrigal sobre un tema popular, Concierto breve con Alicia de Larrocha y Laberinto (Emi M7 64806). Menos soñadora y cadenciosa que éstas es la interpretación de Teresa Berganza, intencionada y llena de sabor, que se incluye en un álbum de dos cds de Canciones españolas, desde Alfonso el Sabio a prácticamente nuestros días. Es la versión original con piano, que tañe en este caso Félix Lavilla (DG 4358482-1). Otra mezzo, la inglesa Della Jones, las ha grabado con Malcolm Martineau al piano en disco que contiene asimismo otras canciones de otros compositores españoles como Falla, Granados, Turina, Obradors y Guridi (Chandos 9277).
No figura en compacto la sensible interpretación de Montserrat Caballé y Alexis Weissenberg de 1980 (Emi) ni la refinada de Isabel Penagos y Miguel Zanetti de 1968 (Zafiro). Debemos mencionar, entre las más recientes, la de la María José Montiel y este último pianista, llena de encantador y cálido lirismo, que convive con otras piezas de Granados, Rodrigo, Ernesto Halffter, Ginastera y Guastavino (Rtve 65115). Está grabada también una reciente (1998) versión para soprano y violonchelo, aquí conjunto de violonchelos, con Y. H. K. Peral y el grupo de Elías Arizcuren (Channel Classics CCS 13398). No aparece sin embargo la preparada por el propio autor para voz y pequeño conjunto con percusión.
La citada María José Montiel tiene registrada en 1998 una bella interpretación de las Canciones para niños de 1953, sobre texto de Lorca, como los de las demás canciones incluidas, firmadas por García Abril, Leoz y Bautista. Al piano, Fernando Turina (Ensayo 9804). En el capítulo vocal y coral tenemos una versión pasable de la Sinfonía de Requiem de 1985, con Catalina Moncloa, la Orquesta Sinfónica de Madrid y Ros Marbà, que convive con el Concierto breve del mismo autor (con el pianista Leonel Morales) y la Zarabanda lejana y Villancico de Rodrigo (Marco Polo 8 223753).
Obra para piano
Pasando al piano solo encontramos una buena parte de las composiciones para el instrumento en el recital de Ramón Coll de 1992 (Etnos 10-A-36). No exactamente las mismas -entre uno y otro casi se reúnen todas- aparecen en el disco de Benita Meshulam (Asv CA 1022). Larrocha por su parte, con su solidez técnicay su gracia habituales, integra en un CD algunas de las más relevantes -Sonatina para Yvette, Berceuse óscar Esplá, Tres divertimentos- junto a varias obras de Falla, entre ellas la Fantasía baetica (Rca 61389). En el mundo concertante contamos con varias grabaciones del conocido Concertino 1 + 13. Quizá la mejor sea la de los hermanos Claret con la Orquesta de Andorra. Contiene también Postals illuminades del autor y otras piezas de Casals y Toldrá (Nimbus 5482).
Música instrumental
En el campo sinfónico contamos con el buen trabajo de Adrian Leaper y la Filarmónica de Gran Canaria, que nos acerca a algunas de las partituras más valiosas de su catálogo: Laberinto, antes mencionada, de 1971, Folia daliniana, de 1996, Sortilegis, de 1992 y Sinfonía Mediterránea, de 1948 (Asv 1060). De interés el firmado por el violinista Santiago de la Riva y el pianista ángel Gago en 1996 con Spanish Sketch, Lullaby y Paráfrasis concertante o el del chelista Rafael Ramos y el pianista Josep María Colom con la Sonata concertante (en unión de otras obras de Granados, Cassadó, Turina y Nin) (Rtve AME 005). Destacar la hermosa Serenata para Lydia de Cadaquès por la flautista Magdalena Martínez con la Orquesta de Barcelona dirigida por Lawrence Foster, (Claves 50 9808).