Este joven valor de la liederística moderna se sitúa ya a la sombra de los Goerne y Quasthoff, que son los que hoy parecen cortar fundamentalmente el bacalao en este terreno. Gerhaher, que nació en la ciudad alemana de Straubing, estudió con Paul Kuen y Raimund Grumbach y recibió lecciones de Dieskau y Schwarzkopf. Ha actuado ya en España. No nos encontramos ante una voz fuera de lo común -muy lírica, no muy grande, sin especial metal ni riqueza de armónicos, limitada, como la de casi todos estos barítonos germanos de hoy, en la zona superior-, pero sí nos topamos con un cantante inteligente, expresivo, dúctil, capaz de matizar excelentemente a media voz y en falsete. Posee una dicción elocuente y clara y sabe situarse en el punto dramático justo, como en los severos 6 Monólogos de Jedermann del suizo Frank Martin (1890-1974). Muy bellos los siete lieder de Schubert y sólidos, bien que sin la contundencia ideal, los Cuatro cantos serios de Brahms. Adecuada labor del pianista.