La importancia de este disco no es la de contener una magnífica interpretación de la famosas suite Los planetas de Gustav Holst (1874-1934), compuesta durante la primera guerra mundial, sino la de ir acompañada de partituras dedicadas a los astros del sistema solar descubiertos tras la muerte del músico. Colin Matthews realizó en su momento los pentagramas alusivos a Plutón aplicando los planteamientos armónicos de Holst a su propio estilo. Recientemente, dentro del proyecto conocido como Ad Astra, cuatro compositores evocan otros tantos asteroides: Kaija Saariaho, Toutatis, Matthias Pintscher, Osiris, Mark-Anthony Turnage, Ceres y Brett Dean, Komarov. Han optado, destaca Rattle, por una aproximación moderna, profunda y trágica del espacio. De tal forma, el original de Holst parece más moderno que en su tiempo. El álbum se completa con un video dirigido por Paul Bates: The making of the Planets and Asterorides. Soberbia y reveladora recreación sinfónica, en la que las luces ya conocidas nos son ofrecidas desde otra perspectiva. Que a veces nos hace olvidar, pese a la fabulosa orquestación, la vulgaridad de ciertos pasajes del compositor británico.