La comprensión profunda que evidencia en este CD Leticia Moreno de los pentagramas del creador argentino le da pie para solventar cualquier dificultad técnica y para dejarse mecer por los aires de danza, entregarse al disfrute del fraseo más efusivo y aplicar, sobre el ritmo implacable, un empleo ejemplar del rubato. Las Cuatro estaciones porteñas se ofrecen en el arreglo para orquesta y violín solista de Leonid Desyatnikov (1955), en donde participa una estupenda Filarmónica de Londres a las órdenes de Orozco-Estrada. En el resto de las páginas -Oblivion, Concierto para quinteto, Adiós, Nonino, Le Grand Tango, La muerte del Ángel, Milonga del Ángel- Moreno toca con Pablo Mainetti, bandoneón; José Gallardo, piano; Janne Salsala, contrabajo; y Remy van Kesteren, arpa, instrumento que sustituye a la original guitarra prescrita por Piazzolla. Una traición relativa, ya que la nueva voz concede al conjunto nuevas y nada inoportunas luces.
Mecida por el tango
Piazzolla
13 octubre, 2017 02:00La comprensión profunda que evidencia en este CD Leticia Moreno de los pentagramas del creador argentino le da pie para solventar cualquier dificultad técnica y para dejarse mecer por los aires de danza, entregarse al disfrute del fraseo más efusivo y aplicar, sobre el ritmo implacable, un empleo ejemplar del rubato. Las Cuatro estaciones porteñas se ofrecen en el arreglo para orquesta y violín solista de Leonid Desyatnikov (1955), en donde participa una estupenda Filarmónica de Londres a las órdenes de Orozco-Estrada. En el resto de las páginas -Oblivion, Concierto para quinteto, Adiós, Nonino, Le Grand Tango, La muerte del Ángel, Milonga del Ángel- Moreno toca con Pablo Mainetti, bandoneón; José Gallardo, piano; Janne Salsala, contrabajo; y Remy van Kesteren, arpa, instrumento que sustituye a la original guitarra prescrita por Piazzolla. Una traición relativa, ya que la nueva voz concede al conjunto nuevas y nada inoportunas luces.