Las iniciales M.C. (tan manoseadas últimamente) se cruzaron en el camino de Chema Pizarro como reflejo de un momento sociopolítico, "que no cultural", muy parecido al del Siglo de Oro. Lo que en un principio debía ser un diálogo entre Cervantes, Shakespeare y otros clásicos como Lope y Quevedo, se transformó finalmente en MC manco y de la Mancha, un monólogo protagonizado por el propio Pizarro que llega al Festival de Cáceres el próximo miércoles, 17 de junio. "La noticia de la búsqueda de sus huesos, esa tabla con las iniciales y la opinión generada por el asunto le fue dando forma al espectáculo. Y nombre", explica el autor y actor a El Cultural.



La vida ruinosa del que acabó siendo el nombre más grande de las letras españolas y la relación entre los valores del Quijote con su peripecia existencial han sido los motores de una puesta en escena sencilla, "muy metafórica", donde los personajes se mueven entre la muerte real y la muerte de los objetivos. El montaje se caracteriza por su marcado carácter clown (cuando se habla del fracaso y de cómo se proyecta), por las situaciones anacrónicas, por el planteamiento del actor frente a los retos de una vida que se enfrenta al éxito sin conocerlo, por los gags desconcertantes en los que se busca el error antes que la risa y por los chistes malos. Según Pizarro, estos ingredientes nos hacen recorrer un camino que irá progresivamente de la comedia al drama.