José Luis Gómez y Ana Belén como Romeo y Julieta. Foto: Javier Naval

José Luis Gómez y Ana Belén como Romeo y Julieta. Foto: Javier Naval

Teatro

José Luis Gómez (Romeo) y Ana Belén (Julieta), más allá del amor, del tiempo y de la muerte

Los veteranos actores protagonizan en el Español un nuevo diálogo con la tragedia de Shakespeare en el que los protagonistas se reencuentran en plena madurez

15 abril, 2023 02:29

"Sí, es posible el amor cuando se es mayor. Diría que es un amor inefable y milagroso. Es como una reflexión de la luz en el espejo, cuando se empieza a ver lo que ocurre y  cuando se perciben esos sentimientos intensísimos. Es vida, es luz, es todo". Así reflexiona José Luis Gómez a la hora de presentar Romeo y Julieta despiertan, la obra que, a partir de este 15 de abril, compartirá con Ana Belén en el Teatro Español dirigida por Rafael Sánchez y escrita por E. L. Petschinka.

El director suizo y el autor austríaco no son nuevos en nuestras tablas. Se les recuerda por su adaptación, en 2018, de Tiempo de silencio, de Luis Martín-Santos, en La Abadía. Por eso ahora han recogido la idea que les propuso José Luis Gómez para afrontar un nuevo diálogo con el clásico de Shakespeare en el que Gómez y Ana Belén se reencuentran tras varias décadas de letargo.

Ambos se desperezarán con sus experiencias personales (Ana Belén recordando su primera interpretación de Julieta junto a Tony Isbert durante un televisivo Estudio 1 de 1972) y Gómez (a partir del 30 de mayo, Jesús Noguero) a través de un aturdido cóctel de versos de Romeo, Hamlet y Don Juan Tenorio.

“En la tragedia de Shakespeare vemos a dos jovencitos de 13 y 14 años que acaban con sus vidas porque la sociedad no les permite amarse –explica Sánchez a El Cultural–. En nuestra propuesta, vemos a dos personas mayores que intentan redescubrir el amor y se topan con una sociedad que no se lo permite. Las razones son diferentes a las de 1600. Hoy queremos cumplir todos 120 años, pero a la gente mayor la expulsamos de nuestras vidas, no les dejamos participar. Hay dos papeles principales para mayores y eso es algo que casi no existe en el teatro, y menos para mujeres. Nuestra Julieta se emancipa en todos los sentidos. Al final, hasta del texto original”.

“Nuestra Julieta se emancipa en todos los sentidos. Hasta del texto original”. Rafael Sánchez

El diálogo con el clásico del bardo de Stratford termina convirtiéndose en una conversación entre la juventud y la vejez, un encuentro con el implacable paso del tiempo: “Un aspecto importante de la versión es el momento en el que los dos se dan cuenta de que ya no son jóvenes, que han pasado sus vidas durmiendo. Se preguntan entonces si de veras aprovecharon sus vidas. Tarde o temprano, todos terminamos haciéndonos esa pregunta. La respuesta no no nos deja dormir o nos desasosiega”.

Para Sánchez, los personajes interpretados por Ana Belén y Gómez son íntimos y frágiles gracias a la forma de escribir de Petschinka, un estilo directo en el que siempre se dirige al público. Con él, resulta imposible esconderte detrás del personaje: “Sus creaciones nunca olvidan que están contando una historia. Son coherentes con los intérpretes”.

[Shakespeare, poeta del caos]

Según Sánchez –que actualmente mueve su pasión escénica entre el Staatstheater de Dresde (con una versión de Arlequino, servidor de dos patrones, de Goldoni), y un montaje sobre “antifeministas” que parte de un libro del periodista Tobias Ginsburg– , Romeo y Julieta despiertan es una forma nueva de enfrentarnos a la obra, y se pregunta qué es lo que la hace actual en estos momentos: “Hasta hoy, nuestro interés solo se debía a la historia de amor entre dos adolescentes. La juventud es un poderoso vehículo para vendernos toda clase de emociones, pero no solo. El sistema no sería tan eficaz si no supiese vendernos también toda clase de productos para sentirnos más jóvenes”.

“¿Amar?, se pregunta Julieta en el tramo final de la obra. “¡Amar de nuevo!/ Ya veo,/ crees que las miradas ardientes solo llegan/ cuando se es joven./ El deseo solo llega mientras se es bello”.