Fachada del Archivo Regional de Madrid. Foto: J.L. De Diego

Con motivo del Día Internacional de los Archivos, que se celebra este sábado, la Comunidad de Madrid, además de organizar otras actividades, expone por primera vez el Manuscrito de Móstoles, un documento del siglo XIX con claves de las Cortes de Cádiz que hoy descansaría hasta su desintegración entre cascotes y cáscaras de plátano de no ser por un vecino de Griñón que lo encontró en un contenedor de escombros hace un año. El escrito está firmado por el dominico Jaime de Villanueva (1765-1824), que sería más adelante redactor del Diario de sesiones de las cortes gaditanas hasta 1813, y aporta referencias a otros documentos que sirven al autor para defender la plena legitimidad de las Cortes, cuestionada desde algunos sectores. El manuscrito fue hallado junto con otros escritos de los siglos XVIII y XIX a los que se bautizó como Colección Francisco de Laborda.

La anécdota invita a preguntarse cuántos documentos habrán corrido peor suerte y cuántas piezas faltarían en el puzle de la Historia si no fuera por la silenciosa labor de los archiveros. Aprovechamos la efeméride para hablar con la directora general de Archivos, Museos y Bibliotecas de la Comunidad de Madrid, Isabel Rosell, sobre la situación de estos templos y albaceas del pasado.

Pregunta.- ¿Qué importancia se da a los archivos en comparación con otras instituciones culturales como bibliotecas y museos?
Respuesta.- La Comunidad de Madrid concede gran importancia al área de Archivos como puede constatarse por el importe que destina a ese programa que, para el año 2012 supone algo más del 13% del total de las cantidades gestionadas por mi departamento, y cuenta con 96 personas. Considerando que sólo el presupuesto destinado a fomento de la lectura y bibliotecas, abarca más de dos tercios de toda la Dirección General, el presupuesto para archivos es muy importante; sobre todo si tenemos en cuenta que gestiona directamente sólo dos grandes archivos: el Archivo Regional y el Archivo Histórico de Protocolos de Madrid. Los casi siete millones de nuestro programa de archivos constituyen una cifra de envergadura considerable también, si la comparamos con la prevista para el presupuesto de archivos estatales, de 40,5 millones, ya que el Ministerio debe gestionar, con ese presupuesto, directamente los grandes archivos generales (Histórico Nacional, Indias, Corona de Aragón, Chancillería de Valladolid, Centro Documental de la Memoria Histórica en Salamanca, Archivo General de la Administración…) además de los edificios de los archivos de gestión transferida (archivos históricos provinciales y de protocolos).

P.- ¿Cuáles son los retos más inmediatos de los archivos?
R.- El principal reto que afrontan nuestros archivos en el momento actual es el de la adaptación a la Administración Electrónica, que obliga a la revisión de los protocolos tradicionales en cuanto al flujo de documentos entre archivos, desde su nacimiento hasta su expurgo o selección para conservación permanente. Al respecto, un reto esencial es encontrar soluciones definitivas para una conservación de garantía (autenticidad, fiabilidad, trazabilidad…) a largo plazo de los documentos electrónicos.

P.- ¿Cómo marchan las labores de digitalización de estos archivos?
R.- Además de los trabajos rutinarios de digitalización de los fondos de mayor valor visual, básicamente los archivos fotográficos de Santos Yubero, ya digitalizado íntegramente, y de Cristóbal Portillo, digitalizado en un 25%, se están acometiendo otros proyectos de digitalización como el del fondo Mahou, conservado en el Archivo Regional. También se están convirtiendo a formato digital los documentos microfilmados de que disponemos; muy numerosos son los reproducidos en este formato en el Archivo Histórico de Protocolos y en los fondos municipales ingresados en depósito en el Archivo Regional.

P.- ¿Cuáles son los archivos municipales más importantes de Madrid?
R.- Todos los municipios cuentan con archivo, aunque no todos disponen de un servicio plenamente profesionalizado. De los 41 que sí lo tienen, destacan, por el patrimonio documental que custodian, los de Madrid (Archivo de Villa), Alcalá de Henares, Chinchón, El Escorial, San Lorenzo de El Escorial, Aranjuez, Arganda, San Fernando de Henares, Móstoles, Getafe, entre otros.

P.- ¿Cuáles son los documentos más relevantes de los que se custodian en el Archivo Regional?
R.- Destacarían, por su importancia para la historia de la Comunidad de Madrid, los documentos correspondientes al fondo de la extinta Diputación Provincial de Madrid, que se conservan de forma íntegra desde su constitución en 1813 hasta su desaparición en los años ochenta del siglo pasado. Además, la Diputación, tras la desamortización, asumió las competencias, y con ellas los documentos, de numerosas entidades de beneficencia de las que conservamos sus fondos íntegros. Otras instituciones heredadas por la Diputación, de gran importancia cultural, son las que controlaban las representaciones de los corrales de comedias ya que con parte de sus recaudaciones se financiaban algunas de estas instituciones benéficas. Estos fondos aportan informaciones esenciales sobre la historia de nuestra literatura.

Destacan, por su antigüedad, los fondos de carácter histórico de algunos municipios que se conservan en el Archivo Regional, entre los que se encuentran documentos medievales. El más antiguo es del año 1330 y procede del Ayuntamiento de Torrelaguna.

Además de los documentos del Archivo Regional, merecen destacarse, por su altísima importancia histórica, los fondos del Archivo Histórico de Protocolos de Madrid, que cuenta con las escrituras de los notarios de la provincia desde el siglo XV hasta 1912. Entre esas escrituras encontramos compraventas, testamentos, poderes y otros documentos notariales otorgados por personajes históricos de la importancia de Cervantes, Lope de Vega, Velázquez, Goya...