Librería Altair

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Cuatro veces más grande que nuestro sol, Altair no es sólo la estrella más brillante de la constelación de Aquila ("El Águila"). También da nombre a una de las mejores librerías europeas, si no la mejor, especializada en viajes. Su aventura arrancó en Barcelona, en 1979, de la mano de Pep Bernadas y Albert Padrol, y en 1997 abrieron, con la complicidad de Pilar Rubio, otra Altair en Madrid que acaba de celebrar sus primeros 15 años.



Jamás, dice Bernadas, han perdido de vista la idea inicial, ese "explicar el mundo a la gente con el pretexto de los viajes, sin olvidar los aspectos políticos, sociales y culturales de cada país, y enseñar a mirar, a viajar con conocimiento, emoción y pasión". Porque lo de Altair va más allá de vender libros en los 1.000 metros cuadrados de Barcelona y los 200 madrileños: tienen su propia revista, organizan encuentros con escritores viajeros, exposiciones de fotografías y concursos de relatos. Su fondo documental tiene unas 80.000 referencias en Barcelona, y 40.000 en Madrid , y no se ciñe sólo a libros, sino que incluye DVDs, revistas y mapas. Cuentan incluso con un "Tablón de anuncios" en la red, que invita a insertar su mensaje a "Todo el que desee obtener información sobre un destino concreto, busque compañía para un viaje o quiera conseguir o desprenderse de material viajero".Y si no, siempre queda buscar entre sus estanterías ese título de Conrad o Reverte que será un billete para el mejor de los viajes, el imaginario.