"Un hombre es todos los hombres. También Borges me enseñó que igual sucede con los libros", proclama el escritor y periodista Guillermo Busutil (Granada, 1961), que explica también que si tuviese que escoger entre los diez mil que ha llegado a tener "o los cinco mil a los que ha quedado reducida la isla en la que escribo", sus dos imprescindibles son "La Odisea de Homero. Primero en la voz de mi abuelo. Después solo en mi lectura. En sus páginas aprendí el rumbo interior del viaje, sus batallas y sus cicatrices" El otro imprescindible es El Aleph de Borges,"que me descubrió el yo real y el yo que inventamos, que dentro del lenguaje tiene que suceder lo que se cuenta. Que la literatura es un aleph".



Todo empezó muy pronto para el autor de Noticias del frente: siempre ha tenido libros tanto "al lado de mis sueños infantiles, frente a mi adolescencia y a las espaldas de donde escribo". Sus familiares, los amigos, los amores, nunca han dejado de regalarle lecturas, "lo mismo que yo, con afecto y sin motivo. Igual que los obsequio sobre los bancos de un parque." Su biblioteca tiene "además de la imprescindible custodia de los clásicos, buenas cartas de navegación por la poesía, la novela y el ensayo. La suma de todos es mi estilo". Adicto a las librerías, no puede evitar entrar en ellas. Por eso, espera que sigan existiendo, "aunque sean clandestinas o estén en un bosque, aunque los libros sean virtuales o como las antiguas caracolas con voces humanas".