Íñigo Méndez de Vigo
Méndez de Vigo era hasta ahora secretario de Estado para la Unión Europea. Rajoy ha agradecido al ministro saliente, José Ignacio Wert, la tarea realizada.
Moderado, dialogante y experto en temas europeos. Este es el perfil escogido por el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, para sustituir a José Ignacio Wert al frente del Ministerio de Educación, Cultura y Deporte cuando quedan escasos meses para el final de la legislatura. Íñigo Méndez de Vigo ocupaba hasta la fecha la Secretaría de Estado para la Unión Europea, adonde llegó de la mano de su amigo y titular de la cartera de Asuntos Exteriores y de Cooperación, José Manuel García Margallo, con quien había coincidido en Bruselas durante la etapa de ambos como eurodiputados, un periodo que en el caso de Méndez de Vigo se prolongó durante 17 años. Como eurodiputado, Méndez de Vigo tuvo un papel destacado en la redacción de la nonata Constitución europea, cuyo contenido se trasladaría después, con algunas modificaciones, a lo que hoy conocemos como el Tratado de Lisboa.
Suya fue -y también del eurodiputado José María Gil Robles y el alemán de la CDU Elmar Brok- una iniciativa de 2002 que asumió el Partido Popular Europeo para democratizar la elección del presidente de la Comisión Europea y que se considera el germen del nuevo modo de elección de este cargo, aplicado por vez primera tras las últimas elecciones al Parlamento Europeo, en las que las principales familias políticas nombraron candidatos a la Comisión, de manera que los ciudadanos pudieran saber antes de votar a quién iba a a apoyar cada partido para dirigir la Comisión.
También tuvo un papel destacado en la negociación para que la nonata Constitución europea dejase claro que la integridad territorial de los Estados es una competencia exclusivamente nacional y que la UE no tendría capacidad para reconocer una secesión unilateral por parte de una región de un Estado miembro, justo en plena efervescencia del plan Ibarretxte. Hoy este principio está recogido en el artículo 4.2 del Tratado de la UE, que es el que justifica la exclusión automática de la UE de un territorio que se escinda unilateralmente de un Estado miembro europeo.
Los artistas, autores, editores y productores se han dado prisa en demandar al nuevo ministro de Educación, Cultura y Deporte, Íñigo Méndez de Vigo, cambios en la política sobre propiedad intelectual y un diálogo constructivo que permita aprovechar los meses que quedan de legislatura para encontrar soluciones de consenso a los graves problemas que ha creado la reciente reforma de la Ley.
Méndez de Vigo nació el 21 de enero de 1956 en Tetuán (Marruecos), entonces bajo Protectorado español, donde su padre había sido destinado como teniente de Infantería. Por línea materna es nieto de la escritora Carmen de Icaza, a quien sucedió en el título de Barón de Claret en 1980. Estudió bachillerato en el Colegio Alemán de Madrid, inglés y francés, y se licenció en Derecho por la Universidad Complutense de Madrid en 1978. Aprobó la oposición a Letrado de las Cortes Generales en 1981 y un año después fue nombrado director de Relaciones Interparlamentarias de las Cortes.
En 1984 se incorporó al gabinete del secretario general del Consejo de Europa como consejero especial de Marcelino Oreja y cinco años después ingresó en el Partido Popular en el Congreso de la refundación celebrado el 21 de enero de 1989. Ese mismo año fue candidato del PP en las elecciones europeas, aunque no fue hasta 1992 cuando obtuvo un escaño en la Eurocámara. Ha sido coordinador y portavoz del Partido Popular Europeo en la Comisión de Asuntos Constitucionales, así como miembro de la Comisión de Asuntos Económicos y Monetarios.
También ha participado como componente del Parlamento Europeo para los Tratados de Amsterdam (1997), Niza (2001), Constitucional (2004) y Lisboa (2007). El 29 de enero de 2002 fue elegido presidente de la delegación del Parlamento Europeo en la Convención sobre el futuro de la Unión, y como tal fue miembro del Presidium encargado de redactar la nonata Constitución europea.
Consejero de la Fundación europea de las Ciencias y la Cultura, en 2001 fue nombrado vicepresidente de la ONG Ayuda en Acción, en 2003 patrono de la Fundación Acción Familiar y un año después presidente del Intergrupo de la Asociación ATD Cuarto Mundo. De forma paralela a su carrera política ha desarrollado una intensa actividad profesional y docente. Abogado del Colegio de Madrid, fue socio del Bufete Ruiz-Navarro y Asociados, y de 1994 hasta 1998, socio-director del Bufete García-Margallo y Méndez de Vigo.
Ha sido profesor de Derecho Constitucional en la Universidad Complutense (1982-1984), profesor invitado del Instituto Internacional de Derechos Humanos de Estrasburgo (1984-1989) y profesor de Derecho comunitario en el CEU San Pablo (1989-1992). De 1999 a 2003 ha sido titular de la Cátedra Jean Monnet de Instituciones europeas en la Facultad de Derecho de la Universidad Complutense de Madrid. En diciembre de 2003 fue designado presidente del Consejo asesor del Instituto de Estudios Europeos de la Universidad San Pablo CEU. En octubre de 2009 fue nombrado Presidente del Consejo de administración del Colegio de Europa.
También es autor de numerosas publicaciones sobre temas europeos y constitucionales, algunos de ellos escritos junto a García-Margallo, como Una Reforma Fiscal para España, Financiación de las Comunidades Autónomas y Corresponsabilidad Fiscal o La Apuesta Europea: de la moneda a la Unión Política.