Rafael Chirbes
El escritor valenciano, tal y como deseaba, contará con una fundación para gestionar su legado literario y ayudar a la cultura y el patrimonio de su tierra
La fundación Rafael Chirbes, que dirigirá su sobrina María José, está a la espera de los últimos trámites burocráticos para ser una realidad, según ha informado uno de sus miembros y amigo del escritor, Alejandro Nogales. Nogales conoció a Chirbes cuando el novelista dejó Madrid y se afincó en 1988 en un pequeño pueblo de Badajoz, Valverde de Burguillos, en busca de tranquilidad para escribir. Allí permaneció doce años.
Aunque hasta entonces no se conocieron, tenían amigos comunes y curiosamente no coincidieron por días en 1971, en Madrid, cuando ambos fueron detenidos por su militancia antifranquista y pasaron por la temida Dirección General de Seguridad y la cárcel de Carabanchel.
La fundación, que cuenta con un puñado de miembros entre amigos y familiares del escritor -también está Manolo, su otro sobrino-, se financiará con sus derechos de autor y tendrá su sede en la casa de Chirbes en Beniarbeig (Alicante), según Nogales. Se convertirá en una especie de centro cultural en el que estarán sus obras, los más de 8.000 volúmenes de su biblioteca personal y posiblemente algunos de sus muchos cuadernos y notas que están pendientes de clasificar y evaluar por si hay algo publicable.
Nogales ha advertido de que estudiar y catalogar estos escritos y ordenar sus libros supondrá un arduo trabajo. La otra faceta de la fundación será de apoyo a la cultura y patrimonio valenciano. En este sentido, la obra que Chirbes dejó preparada unos meses antes de su muerte, París Austerlitz, de la que no ha querido adelantar nada y que lleva el nombre de la estación de ferrocarril de la capital francesa, saldrá a la venta en enero.