Eugenio de Nora

El poeta de posguerra Eugenio de Nora, que permanecía ingresado desde hace cinco semanas en un hospital de Madrid por un proceso gripal, ha fallecido esta madrugado a la edad de 94 años, a consecuencia de una insuficiencia respiratoria, según han informado sus familiares.



Premio de las Letras de Castilla y León en 2001, de Nora era uno de los poetas existenciales más importantes de España, conocido como gran poeta social de la posguerra y renovador de la poesía de su época, crítico literario y profesor de prestigio internacional. Nacido en Zacos el 13 de noviembre de 1923, se trasladó a León junto a su familia en 1932 y en 1941 a Madrid donde se instaló en la Residencia de Estudiantes. Junto a Victoriano Crémer y Antonio González de Lama fundó la revista literaria Espadaña, donde reivindicaban una literatura de mayor "vibración anímica". En sus páginas, explica Guillermo Carnero en una crítica a la Obra poética reunida del autor, "aparecieron poemas sobre la tragedia y la angustia de la existencia y de la duda religiosa, y las primeras manifestaciones de poesía social. Nora, mientras publicaba metapoemas exigiendo una actitud realista y de denuncia, vapuleaba, en críticas y reseñas, "el lenguaje poético marfilesco y mandarinesco" o "la influencia del azúcar en la joven poesía".".



Licenciado en Filología Románica, Eugenio de Nora se doctoró en la Universidad Central de Madrid, con una tesis sobre la transición de la literatura deshumanizada al nuevo realismo en el arte narrativo en España, entre 1920 y 1940. Fue redactor de Cisneros y escribió el libro clandestino y anónimo, Pueblo cautivo, donde en palabras de Carnero, "se consagró definitivamente como pionero de la poesía española de crítica y resistencia política" al tratarse esta de una "denuncia inequívoca de la falta de libertad en la España posterior a 1939, de la represión sufrida por los vencidos y de la mezquindad de los vencedores".



Traductor, entre otros, de T.S. Elliot, W.B. Yeats, Paul Claudel, Paul Válery, Jean Cocteau, Pierre Emmanuel y Eugenio Montale escribió ensayos sobre Antonio y Manuel Machado, Vicente Aleixandre, Celaya, Otero, Max Aub, Cela, F. Ayala, Ignacio Aldecoa y José María Merino. Entre sus reconocimientos y logros, además de Premio de las Letras de Castilla y León, fue doctor Honoris Causa por la Universidad de León (2000), obtuvo un accésit del Premio Adonais en 1947, el Premio Boscán de Poesía en 1953, el Premio de la Crítica en 1958 y el Premio León Felipe en 1998.



Su poesía se encuentra recogida en diversas publicaciones como Cantos al destino (1945), Amor prometido (1946), Contemplación del tiempo (1948), Siempre (1953), España, pasión de vida (1953), Poesía (1975), No he de callar (1997), Días y sueños (1999), y Canción (2004).