Pasea Madrid (y si es con un escritor, mejor)
El Ayuntamiento de Madrid ofrece 11 visitas guiadas por la capital que, desde El Cultural, recorreremos junto a otros tantos escritores
8 octubre, 2020 16:26¿Conoces el legado del urbanista Arturo Soria? ¿Sabes cuándo se anexionó a Madrid el pueblo de Hortaleza? ¿O que el frontón Beti Jai, el más antiguo de España, está en Madrid? ¿En qué calles se inspiró Goya? ¿En cuáles lo hizo Galdós? Madrid bien vale un paseo. 11 en este caso. Rutas que recorren de norte a sur y de este a oeste otros tantos barrios y monumentos de la capital. Organizadas por la Dirección de General de Patrimonio Cultural, las visitas, gratuitas, están diseñadas para que los madrileños conozcan el rico patrimonio cultural y arquitectónico de su ciudad.
En esta primera fase (esperan una prórroga con nuevos destinos el año que viene), el éxito de la convocatoria fue tal que las entradas se agotaron en las primeras horas de abrirse la reserva en la página web de Patrimonio y ya hay lista de espera para todas las visitas. Dado que la mayoría de los paseos son al aire libre, los grupos son de cinco personas más el guía para cumplir con las medidas sanitarias. Y para los que nos hemos quedado con las ganas de ir, hemos organizado, desde El Cultural con el apoyo de la Dirección de General de Patrimonio Cultural, once recorridos literarios que, a partir de la semana que viene, daremos de la mano de un escritor que paseará por el barrio ofreciéndonos una mirada más personal al Madrid que cruzamos cada día.
Para conocer el legado del urbanista y político Arturo Soria está pensado el paseo por Ciudad Lineal. Coincidiendo con el centenario del fallecimiento de este pensador, inventor y cronista de Madrid, se ha ideado un recorrido de 2 horas por la “ciudad del porvenir”. Preocupado por el medio ambiente, la contaminación, el precio de la vivienda, la distribución de la riqueza, la despoblación rural, la sostenibilidad y la movilidad, Arturo Soria dejó un legado que todavía se percibe hoy si uno se adentra por la calle a la que da nombre.
Si hay un distrito en Madrid que haya guardado mejor la esencia de su origen independiente ese es el distrito de Barajas. Un barrio de contrastes que van desde su Plaza Mayor que nos transporta a una villa castellana del siglo XVI al cercano aeropuerto que llegó en la primera mitad del siglo XX para conectar Madrid con el mundo. La ruta, de dos horas de duración, discurre por el casco antiguo.
En 1950, los pueblos de Hortaleza y Canillas se anexionaron a Madrid, naciendo así al este de la capital el distrito de Hortaleza. En este paseo se descubre su origen, las transformaciones y la esencia de estos pueblos a partir de una ruta que recorre los enclaves que aún quedan de entonces: las grandes quintas de recreo, la iglesia y cementerio del pueblo…, así como icónicos edificios de la arquitectura contemporánea, fruto de su rápido crecimiento urbano de mediados del siglo XX.
Goya bien merece una visita. Genial pintor de cámara de la realeza, ilustrador, testigo y narrador de la historia de su época, este paseo recorre algunos lugares cercanos al Palacio Real que inspiraron al artista. Su mirada nos presentará a las gentes del Madrid de finales del siglo XVIII y comienzos del XIX, mostrándonos cómo eran su vida, sus aficiones y su reacción ante la invasión francesa. La visita comienza en la puerta lateral de entrada al Palacio.
Una construcción de singular interés, el Frontón Beti Jai, es objeto de otra de las rutas. Realizado según el proyecto de 1893 del arquitecto Joaquín de Rucoba y Octavio de Toledo, con el fin de construir un frontón para el juego de pelota vasca en la capital, fue inaugurado en 1894 en Chamberí, con una capacidad para 4.000 espectadores. A comienzos del siglo XX el juego decayó, pasando a tener a partir de entonces diferentes usos. Con un estilo muy ecléctico que mezcla el hierro, el vidrio y el hormigón, descubriremos un edificio singular y único en su tipología, declarado Bien de Interés Cultural en 2011.
No podía faltar en el año Galdós, el Madrid más genuino del autor de los Episodios que protagoniza dos de las visitas. Desde el Palacio Real hasta la Plaza de Pontejos, pasando por la Plaza Mayor, esta ruta recorre el Madrid galdosiano así como los espacios asociados a sus obras más aclamadas como Fortunata y Jacinta y La de Bringas. Calles, edificios, comercios y establecimientos que forman parte del Madrid de Galdós, mientras conocemos la historia, sociedad y costumbres de ese Madrid de la segunda mitad del siglo XIX.
Por otro lado, el Galdós más personal parte del Ateneo, lugar de referencia para el escritor, y continúa por otros espacios que marcaron su vida como el Congreso, que conoció como diputado; los teatros del Barrio de las Letras, testigos de su obra teatral; o la Puerta del Sol, donde vivió en primera persona acontecimientos como la noche de San Daniel o la gran reforma de la plaza y donde Madrid se despide de él al paso de su cortejo fúnebre.
Años más tarde, durante la Guerra Civil española, el Jardín del Capricho albergó el Cuartel General del Ejército del Centro de la II República, aprovechando su ubicación lejos de los frentes, sus buenas comunicaciones y el arbolado propicio para el camuflaje. Para ello el parque fue transformado, construyendo y excavándose distintas estructuras. De entre todas destaca el búnker del Estado Mayor, aledaño al palacio, donde trabajaba el Alto Mando. El refugio, construido en 1937 y conocido hoy como el Búnker del Capricho, es un auténtico cuartel subterráneo que pocos conocen, de unos 2.000 metros cuadrados, situado a 15 metros de profundidad.
Otro enclave imprescindible, esta vez en las alturas, es el Mirador del Monumento a Alfonso XII que ofrece espectaculares vistas al Parque del Retiro. Levantado a principios del siglo XX, en 1902, financiándose por suscripción popular, es un ejemplo sobresaliente de la arquitectura historicista. Diseñado por José Grases Riera y finalizado por Teodoro Anasagasti, la estatua ecuestre que lo corona es obra de Mariano Benlliure y bajo la misma se encuentra el mirador de 360º al que se subirá durante esta visita.
Candidata a Patrimonio Mundial de la UNESCO, la zona Prado-Retiro no puede faltar del itinerario. Empezamos por el Paseo del Prado que discurre entre la Plaza de Cibeles y la Plaza del Emperador Carlos V. Su origen se remonta al Prado de los Jerónimos, en alusión a las posesiones que rodeaban el monasterio de San Jerónimo el Real en el siglo XVI y empezó a ser ordenado urbanísticamente por Felipe II, siguiendo el cauce del arroyo de la Fuente Castellana. A finales del siglo XVIII, Carlos III transformó el espacio en el Salón del Prado, decorado con algunas de las fuentes que podemos contemplar hoy. Protegido como Bien de Interés Cultural opta, como decíamos, a convertirse en Paisaje Cultural Patrimonio Mundial de la UNESCO junto con el Jardín del Buen Retiro que será la última de nuestras visitas.
El actual Parque del Retiro tiene su origen en el Real Sitio del Buen Retiro, la segunda residencia de la Monarquía Hispánica en Madrid. Contaba con un gran palacio, articulado en torno a dos patios de aspecto similar a la Plaza Mayor, siendo el actual parque público el lugar de esparcimiento del mismo. Durante la Guerra de la Independencia el palacio fue ocupado por las tropas francesas, que transformaron las distintas edificaciones en cuarteles, arruinando casi todo el espacio. El Retiro que hoy vemos es el resultado de estos avatares históricos y de la restauración llevada a efecto por el Ayuntamiento de Madrid desde que asume su propiedad en 1868.