Profesora y crítica literaria, Jacinta Cremades (Barcelona, 1974) debutó como novelista hace dos años con Regreso a París, un relato inspirado en su propia vida, como lo está también La maldición de Kylemore, ya que, como Adriana, la protagonista de esta segunda novela, también Cremades pasó un año en un internado irlandés.
El libro, que trascurre en tres planos históricos (el siglo XIX, 1994 y la actualidad), narra desde distintas perspectivas la historia del lugar y de tres íntimas amigas –Adriana, Ida y Gela– desde que a los 14 años se conocieron en el internado de la Abadía de Kylemore (Irlanda) y se comprometieron a no casarse por una extraña maldición ligada a la historia secreta de la familia que habitó la casa en el siglo XIX y que parece condenar a muerte a los maridos de las jóvenes. Por eso, como Gela les anuncia que va a casarse, las tres amigas vuelven a Kylemore para cambiar sus destinos entre confesiones y sobresaltos.