¡Buenos días!

Han estado muy cerca de ganar estos poemas:

Marta

Mi paraíso navega en el lienzo / del sol cincelado. Aroma a sombra de brisa/ en las dunas sobre la faz del tiempo

La plasticidad sugerente de este poema no sólo se enmarca en el primer verso, sino también en ese “sol cincelado” tan elocuente, que se proyecta desde el centro mismo del poema. Sensorialidad elegante, con un giro final hacia lo infinito existencial. Bien.

ANA

Pintaba el horizonte unas velas rojas / El mar, celeste casi blanco / Los pájaros alegraban con su trino el duro trabajo de los pescadores.

Elegante enfoque pictórico, en un poema que podemos recorrer como si fuera un lienzo en marcha, una acuarela que se va pintando lentamente con ese “mar celeste, casi blanco” tan llamativo como sutil, antes de la naturalidad final, con su enfoque humano.

Gastón

Amé a Lilith. / Su cabellera de fuego nutre a las mareas, / espesura donde, otra vez, olvidaré mi nombre.

Aquí los versos funcionan como pinceladas nítidas y muy bien definidas, desde el referente culturalista -y mítico- inicial hasta esa poderosa “cabellera de fuego”, más un verso final en la que la identidad se nos diluye. Interesante contraste de realidades. Bien.

Pero el ganador es

MJVIZ

Piso la tierra prometida por los antiguos, / aquel paraíso ilusorio, / tan frágil como los fragmentos dispersos del espejo.

Desde el comienzo asistimos a un territorio mítico matizado, esa “tierra prometida por los antiguos” que nos lleva a un lugar indeterminado, pero reconocible, de la memoria. A partir de ahí, el tercer verso nos habla de nuestra propia fragmentación: poema metafórico envolvente con niveles progresivos de interpretación y un buen final.

Tema de la semana: “Cuenta atrás”. Parece que ya nos va quedando poco de este verano en marcha, pero hemos de vivir cada minuto. Aún nos queda sol entra las manos, y sonrisas al filo de la tarde, y unas copas heladas sobre el bordillo de la piscina, esperando unos sorbos para la eternidad. Y los hombros dorados, y los abrazos tiernos, y esos cuerpos menudos que regatean al día su última ola. Escribamos de eso, en 3 versos y no más de 140 caracteres. Escribamos de esa cuenta atrás que también es la vida.