La Ilíada es una de las obras más antiguas y emblemáticas de la literatura occidental, atribuida al poeta griego Homero, que relata los acontecimientos ocurridos durante la guerra de Troya. Una obra monumental que combina acción, poesía y reflexión filosófica. A través de sus versos, explora la ira de Aquiles, sus consecuencias y los conflictos humanos que surgen en el contexto de una guerra devastadora.

El prestigioso crítico literario Harold Bloom, en El canon occidental, incluye La Ilíada como una de las obras esenciales que han moldeado la literatura universal. Su profundidad temática, su maestría artística y su impacto en la cultura global la hacen atemporal, conectando con cualquier lector en cualquier época y lugar.

La obra ha sido reinterpretada constantemente a lo largo de los siglos en distintas culturas y modalidades. Rosemary Sutcliff, Madeleine Miller, Alessandro Baricco, Robert Wise y Giorgio Ferroni son solo algunas de las figuras culturales que han permitido que La Ilíada siga dialogando con el presente. Ahora, Giovanni Nucci (Roma, 1969) se suma a la lista.

El escritor italiano acaba de publicar una reinterpretación contemporánea en un formato accesible, ligero y moderno, sin perder el vínculo con los grandes temas universales de la obra original. "El mito es algo que está por encima de la persona que lo cuenta y, por eso, la gente se identifica tan fácilmente con estas narraciones", comenta el escritor a El Cultural.

Desde Homero, hemos estado contando las mismas historias una y otra vez. Sin embargo, La Ilíada a la hora del aperitivo (Siruela, 2024) reinterpreta el poema épico no solo para narrar los eventos de la guerra de Troya, sino también para reflexionar sobre temas profundos de la humanidad y de nuestra cultura contemporánea.

Una nueva manera de contar la Ilíada

En la narración original de La Ilíada, los dioses son los protagonistas. "El problema ahora es que nos da vergüenza relacionarnos con lo divino y, por lo tanto, las narraciones de La Ilíada a las que estamos acostumbrados últimamente eliminan a los dioses", opina Giovanni Nucci.

Alessandro Baricco, en Homero, Iliade (Anagrama, 2005), reconstruye fielmente todo el recorrido narrativo de la obra original, pero decidió voluntariamente eliminar a los dioses de la historia. La idea de Nucci era diferente. "Quería devolver la atención a la historia a través de los dioses, que son centrales en La Ilíada".

La Ilíada a la hora del aperitivo ofrece una relectura de la Ilíada desde la perspectiva de los dioses del Olimpo, presentándolos como protagonistas activos y complejos, en lugar de simples observadores. La historia no se centra tanto en los héroes como Aquiles o Héctor, sino en cómo los dioses influyen en los eventos y reflejan las dinámicas humanas.

Caprichosos, cómicos, a veces ridículos, estos dioses participan en los dramas humanos de manera ligera y casual. El escritor los describe encarnando aspectos de la condición humana. Fue James Hillman, citando a Jung, quien dijo que los dioses se han escondido en nuestras patologías. "En el mito, los dioses reflejan los aspectos más profundos de nuestro inconsciente".

Una guerra universal

Nucci presenta la mitología griega como una metáfora de los conflictos y dilemas contemporáneos, como la política, la crisis ambiental y las tensiones sociales. "Cada vez adaptamos los mitos para explicar nuestra condición actual". Es una historia universal que ayuda a entender cómo gestionar determinadas situaciones, ofreciendo explicaciones psicológicas.

Existe un paralelismo entre los conflictos de la sociedad moderna y los de La Ilíada. La Ilíada a la hora del aperitivo aborda temas contemporáneos como la pandemia de la Covid-19, la crisis climática, el patriarcado y las identidades sexuales. "Nos damos cuenta de que La Ilíada está relatando la guerra, uno de los temas que más nos rodean en este momento".

Según el escritor, releer La Ilíada nos da una idea de lo que nos espera: la destrucción total. "Al final, tanto los perdedores como los ganadores serán destruidos. Todos mueren". La Ilíada a la hora del aperitivo se aleja de un relato lineal de batallas para convertirse en una reflexión sobre las fuerzas que guían nuestro mundo.

Desafiar las estructuras tradicionales

La historia que relata Nucci presenta una relectura de los mitos clásicos que desafía las estructuras de poder tradicionales. Los dioses masculinos, como Zeus o Apolo, se muestran con todas sus debilidades y contradicciones, mientras que las figuras femeninas como Atenea y Afrodita tienen roles más complejos y, a menudo, subvierten las normas patriarcales.

"No era mi intención abordar el problema de la crisis del patriarcado, pero esta forma parte de nuestra situación actual, y el mito puede ofrecer una clave para entender lo que está sucediendo". Según el escritor, los dioses griegos no eran patriarcales en sí mismos; al contrario, en el panteón griego es lo opuesto, porque las figuras femeninas son tantas como las masculinas.

En la sociedad hebrea y católica primitiva se fundaban en el patriarcado. Solo existe un Dios masculino y prácticamente no hay figuras de referencia femeninas. En el panteón griego, las diosas son fundamentales. "Protegen la importancia de la maternidad, pero también la niegan, ofreciendo un espectro de posibilidades más amplio".

Según Nucci, en el panteón griego el feminismo está muy bien representado. "Lo que ha ocurrido en Italia es que el mito se ha leído como un cuento patriarcal, y por eso se ha intentado ponerlo patas arriba".

Nucci recuerda que el mito de Ulises se cuenta desde el punto de vista de Penélope, y el de Aquiles, desde la mirada de Briseida, su esclava. "En mi opinión, no es una operación muy inteligente, porque Penélope es un personaje secundario". Hay mitos, por otro lado, donde las protagonistas son mujeres que narran la condición femenina mucho más intensamente de lo que hace el mito de Ulises.