El taller del cerdito Gus es el lugar al que todos sus amigos peregrinan cuando se presenta un problema: del frío que pasa la jirafa en su descapotable a la estrechez del rinoceronte cuando se sube a la vespa. Situaciones en apariencia imposibles hasta que este creativo mecánico entra en acción y logra reciclar artilugios tan vario- pintos como esa escafandra con estufa para la dama de kilométrico cuello o el sillón portátil que acopla en la moto de su colega.



La fuerza de la historia reside sin duda en las coloridas ilustraciones que nos van marcando el transcurrir del día y nos muestran con mucho humor que la imaginación es una buena compañera para dar valor a trastos que pensábamos inútiles. La musicalidad del texto rimado y la invitación al reciclaje son otros valores que encontraremos en este simpático álbum.