Un pedigrí
Patrick Modiano
20 marzo, 2008 01:00Patrick Modiano
Patrick Modiano (Boulogne-Billancourt, 1945) es considerado uno de los mejores escritores franceses contemporáneos. Autor de obras tan célebres como La ronda de noche, La calle de las tiendas oscuras (con la que conquistó el premio Goncourt en 1978) y Dora Bruder, su narrativa no sigue ningún canon ni se somete a los caprichos de ninguna escuela. Modiano se apoya sobre todo en su experiencia personal. Quizá por eso, puebla también sus libros de personajes sin pasado ni futuro, envueltos en una atmósfera melancólica.Ahora se publica en España Un pedigrí, una novela autobiográfica en la que se encuentran algunos de sus temas más queridos: el París de las calles oscuras por el que el autor deambula infatigable al encuentro de la inspiración; la ocupación nazi, el colaboracionismo, el mundo de la clandestinidad...
Sin una auténtica estructura narrativa, Un pedigrí hila algunos episodios de la infancia de Modiano de forma cronológica. Y, sin embargo, a pesar de ser una novela autobiográfica, el tono no puede ser más neutro, porque, como dice el porpio escritor, "más de cuarenta años han pasado y todo esto ya pertenece a otra vida". Por eso, desde su mismo nacimiento hasta la publicación de su primera novela, Un pedigrí es una suma de recuerdos, detalles y anécdotas, de lo que le contaron, de lo que averiguó sobre su pasado y el de sus padres, "dos mariposas extraviadas e inconscientes en una ciudad sin mirada" (pág. 20), a los que, a pesar de su despreocupación y su deseo de mantenerle lo más lejos posible de sus existencias, el autor no guarda rencor. De internado en internado, del piso de su madre al de su padre (que vive con otra mujer), Modiano irá forjando en la soledad al escritor que hoy conocemos.
Quizá sea por el estilo directo de su Modiano, por la indiferencia con la que narra estos fragmentos rescatados de su infancia o quizá por los rostros indefinidos de los personajes fantasmas que atraviesan las líneas de este libro, pero lo cierto es que esta pequeña novela resulta de una gran belleza. Y a través de palabras heladas se descubre una búsqueda incesante de ese padre que se esconde tras pseudónimos , por el que se siente abandonado, y del que no conseguirá descubrir nada, sólo sombras y dolor.