El domingo de las madres
Graham Swift
24 marzo, 2017 01:00Graham Swift
Considerado uno de los chicos dorados de la armada literaria inglesa -junto a los McEwan, Amis, Barnes, Boyd y Rushdie, desde que en 1983 la revista Granta apostase por ellos-, Graham Swift (Londres, 1949) ha construido una carrera cuajada de extraordinarias novelas como El país del agua o Últimos tragos. Comparada con ellas, El Domingo de las Madres no deja de ser una deliciosa obra menor, una joyita que nos devuelve a la Inglaterra de comienzos del siglo XX, tras la I Guerra Mundial, al universo de libros como Los restos del día, de Ishiguro, o de series como Downton Abbey o Arriba y abajo. El hecho de que el relato comience como un cuento ("Érase una vez"), y que el epígrafe de la novela aluda a "La cenicienta" ("Vas a ir al baile"), acentúa la sensación de encontrarnos con un cuento feminista y decadente.La acción transcurre un Domingo de las Madres, el 30 de marzo de 1924, cuando las criadas disfrutaban de su día libre. Ese 30 de marzo, Jane (criada de los Niven) se despide de su amante, el aristócrata Paul Sheringham. Lo que sucede ese día lo cambiará todo, especialmente la vida de Jane, como descubrirá el lector gracias a breves destellos que desvelan cómo, con el tiempo, se convertirá en una novelista famosa.