Image: Acrobacias

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Opinión

Acrobacias

Por Juan Palomo Participe en el blog de Juan Palomo

4 marzo, 2011 01:00

Carlos Fuentes, Pere Pinyol, Santiago Segura y Liam Neeson


El presidente francés ha vuelto a caer en la trampa de lo políticamente correcto (¡qué hartazgo de frase!). Hace un par de meses excluía a Louis-Ferdinand Céline de la lista de personalidades a las que Francia va a conmemorar en 2011(lo lamentaba, como recordarán, Ignacio Echevarría en estas páginas) . Pues bien, ha vuelto a hacerlo: a pesar de que la programación estaba cerrada con museos, artistas y escritores, ha suspendido el Año de México en Francia por los problemas judiciales de una ciudadana gala condenada en el país azteca por secuestro. Y la respuesta ha sido rauda y múltiple. Carlos Fuentes, por ejemplo, ha tildado a Sarkozy de "dirigente bananero", y el Nobel galo, Jean Marie Le Clezio, afirma sentirse "indignado por la arrogancia y menosprecio de su presidente". Pero vendrán más.

Hablar o no hablar de Torrente. Esa es la cuestión. ¿Se pueden llenar portadas y escribir amplios reportajes sobre una película que no se ha visto? Ya verán como sí. ¿Puede convertirse en centro de atención mediática un suceso inexistente? Seguro. Es lo que ocurrirá con el estreno de Torrente 4 la próxima semana, la nueva entrega (esta vez en 3D) de Santiago Segura. Como ya ocurrió con Torrente 3, tampoco se mostrará la película a la prensa antes de su estreno. Segura no tiene el mínimo interés en leer la opinión de la crítica. Sus bodrios siempre han reventado la taquilla. El que también la revienta, pero en USA, es Jaume Collet Serra, convertido ya en el primer director español en encabezar la taquilla estadounidense con Sin identidad (Unknown), cuyo reparto encabeza Liam Neeson. Desde su estreno el 18 de febrero ha recaudado más de 25 millones de dólares.

La esperanza para remontar el mercado editorial la marca el calendario. Es el Día del Libro, que en 2010 movió 20 millones de euros. Lo malo es que este año el 23 de abril cae en plena Semana Santa, así que los editores, especialmente los catalanes, con mayor tradición, llevan meses de reuniones buscando fórmulas alternativas para que la fiesta en la calle se anticipe y nadie pierda. Hay quien se apunta a celebrar las firmas de los autores en las playas, y quien desea celebrarlo el miércoles previo a la gran evasión, dejando, eso sí, el descuento sobre el precio de los libros sólo para el día 23, Sábado Santo, que no están los tiempos para alegrías.

Precisamente por eso, les invito a acudir al Circo Price de Madrid, donde recala este mes una de las mejores compañías australianas, Cirque Oz. Mezcla acrobacias con música, música con humor, una delicia, que le ha valido el reconocimiento de medio mundo. Van a estar en la pista circular madrileña durante todo el mes, lo que es bastante excepcional si atendemos a los periodos de tiempo que suelen permanecer las troupes invitadas. Hay que agradecérselo a Pere Pinyol, director del Price, que por cierto ha conseguido meter en el circo a 175.000 espectadores al año.