Image: Sangre de México

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Opinión

Sangre de México

Por Fernando Aramburu Lea la crítica del Améxica. Guerra de la frontera

8 junio, 2012 02:00

Fernando Aramburu


Recientemente, pinche gachupín, conviví con mexicanos en México. Tienen esos atributos que más me cautivan: la hospitalidad, el uso delicado del idioma, la inabarcable gastronomía. A diario dejaba mi lógica en el hotel, convencido de que me serviría como un abanico en la Antártida. Y así era. Pensaba que lo había visto todo, o mucho, o lo suficiente como para reducir a nociones, trasladar a puntos de comparación, las posibles novedades. En México tuve que vaciarme de criterios. En cada esquina, una escena incomprensible, un hecho insólito, un rasgo sin encaje posible en el mundo racional del que provengo. Y, en todos lados (ritos, muñecos, calacas), la representación incesante de la muerte. Me pidieron que les platicara de los terroristas de mi país. Entre mí comparé el número de víctimas, las causas de las respectivas violencias, los métodos empleados para combatirlas. ¿Qué les iba yo a contar?