H. M. Enzensberger, Víctor Ochoa, Günter Grass y Gerard Mortier

Hay quien sólo recuerda sus éxitos, quien es evocado por sus fracasos, y quien, como Hans Magnus Enzensberger, se ríe de unos y otros y reúne Mis traspiés favoritos, seguidos de un almacén de ideas en un libro que publicará aquí la editorial Clave Intelectual a la vuelta del verano. El escritor alemán no olvida sus desastres de todo (y en todo) género (poesía, narrativa y traducción, ópera, tv y cine) ni cómo le influyeron cuando estaba empezando y cuando ya era un autor admirado en toda Europa. Lo mejor, a mi juicio, es la última parte, en la que ofrece a quien quiera llevarlos a cabo algunos de sus mejores/peores proyectos frustrados, como el de una revista que iba a llamarse "Aleluya" y que a pesar de contar con el apoyo de Günter Grass, Calvino, Walser, Bachmann, Genet, Barthes, Blanchot, Moravia y Pasolini, jamás logró ver la luz. Hace falta ser muy grande, como lo es Enzensberger, para reír, pensar y escribir así.



La idea estaba al alcance de la mano pero hacía falta reparar en ella y trabajarla. Es lo que hicieron Paula Corroto y Begoña Minguito, las principales promotoras de Encubierta, la primera revista digital sobre ebooks descargable directamente en kindle o desde la propia web de la revista (encubierta.com). El modelo es tan sencillo como eficaz. Bajo ejes monográficos como "la crisis" o "el deporte" adelanta capítulos de novedades librescas que acompaña con entrevistas a los autores y, de postre, el enlace al archivo digital del ebook en cuestión, de tal manera que puedes completar el trayecto del periodismo a la literatura sin salir de tu reader. Bueno, bonito y barato: a 1'54 euros la descarga.



Víctor Ochoa trabaja el bronce aunque sus esculturas siempre han aspirado al oro. En su último viaje a España, Michel Beaulac, director artístico de la Ópera de Montreal, entró en contacto con la monumentalidad de sus obras y, tras la experiencia, decidió encargarle una nueva producción de Elektra dada la "conexión artística que había entre la fuerza y la energía de sus esculturas y el gesto musical de Richard Strauss". El proyecto, que dirigirá el maestro Yannich Nezet-Seguin desde el foso, se estrenará en Canadá, pero todo apunta a que se dejará caer también por el Teatro Real en la era post-Mortier.



Dios me libre de poner en duda los hallazgos del CERN en torno al bosón de Higgs pero algunos científicos me dicen por lo bajini que sin una confirmación por otros laboratorios (que no hay, y menos de esas características, salvo que el recortado Tevatron de Chicago de otra campanada) el hito no tiene la corroboración científica necesaria. Menos si es verdad que para encontrar ese "fantasma" se han invertido 7.000 millones de euros y 10.000 puestos de trabajo. Yo, que Dios me libre de poner en duda nada, después de argumentar que la velocidad de los neutrinos no era tal por un cable mal conectado (como el que enchufa mal la lavadora) sólo deseo una pronta confirmación de que Peter Higgs no estaba soñando.