Cartel panameño, José Antonio Marina, Adela Cortina e Israel Galván

Tengo frío en el avión que me lleva a Panamá y la azafata (con blower en el pelo y muy pritty, según mi campañero de asiento) me ofrece una blancket (manta). Cuando llegamos, un guachiman ('watch man') te observa para que no seas un juegavivo (listillo) y te saltes la fila porque hay un cogenalgas (aglomeración) de narices. Mi compañero de asiento es un man que vive en Arraijan ('a right hand'), una ciudad dormitorio a la derecha de la capital, que está fucking porque llega tarde. En la autopista, nos asaltan los spots publicitarios: 'Más pritty que la ñapa del chichero'. 'No me ando con cuecadas' (mariconadas) en el cartel electoral de Theoktisto. En la radio del taxi habla el presidente Martinelli y un 20% de sus palabras son inglesas...

En enero dieron la alarma en estas páginas: la filosofía corría el peligro de desaparecer en la Lomce, la nueva ley de enseñanza que preparaba el PP, y filósofos de aquí y allá (Adela Cortina, Sánchez Tortosa, Gomá, Manuel Cruz,Muñoz, Barrios, Marina, Savater, Argullol, Camps...) defendieron el papel determinante de la materia en la forja de ciudadanos conscientes y críticos. "No puede haber democracia sin filosofía" argumentaron después otros, ya más metido en harina política. Pues nada. Las noticias que llegan de la Ley, en trámites de enmienda, confirman que Historia de la Filosofía pasará ser una asignatura optativa en 2° de Bachillerato. Qué desatino.

Israel Galván sigue imparable. Estos días está encerrado en Londres con el coreógrafo Akram Khan preparando su próximo espectáculo, que se estrenará en junio en el Festival de Otoño a Primavera después de hacer la première en la Maison de la Culture de Grenoble. El que los quiera ver por separado podrá hacerlo el mes que viene en Madrid en Danza (Khan) y en enero en Barcelona (Galván).

Las listas de las mejores películas me dejan mal sabor de boca. Una votación pública con motivo de la Seminci ha declarado a Amanece que no es poco, de Cuerda, como mejor título de los últimos 60 años seguida de Los santos inocentes, de Camus, y El verdugo, de Berlanga. Los críticos y periodistas dieron vencedora a la cinta protagonizada por Pepe Isbert seguida de El espíritu de la colmena, de Erice, y, empatadas, Plácido y El sur. ¿Y qué le dejamos al más grande, o sea a Buñuel?