Miguel Zugaza, David Afkham, El Brujo y Agustí Villaronga

Ciertamente doce años son muchos años. Pero es la primera vez que oigo ruido alrededor del nombre de Miguel Zugaza, director del museo del Prado. Ciertos movimientos, algunas miradas cómplices... La primera vez. ¿Se habrá abierto el melón de la sucesión?



Le había perdido la pista desde su Pa negre, hace ya cuatro años, pero qué alegría enterarme de que Agustí Villaronga ha logrado poner en marcha su próxima película. Se titula El rey de la Habana, es la adaptación de la novela homónima del escritor cubano Pedro Juan Gutiérrez y comenzará el rodaje en primavera. Hay un cine español que siempre merece la pena respaldar, y el de Villaronga es uno de ellos.



La Orquesta Nacional, a la espera de que el prometedor David Afkham tome posesión definitiva de su cargo como titular, atravesará la temporada bajo el gobierno y la inspiración de directores de la división de honor internacional: Bychkov, Eschenbach, Nagano y Luisi. También dos mujeres (¡qué buenas deben de ser!) contribuirán a pulir su sonido. A finales de febrero lo hará la portuguesa Joana Carneiro, que está ahora al frente de la Sinfónica de Berkeley. Y a principios de marzo le tomará el testigo Simone Young, primera mujer en dirigir la Filarmónica de Viena.



Es sabido. El tipo de teatro que se monta en un país marca la realidad que se vive en cada momento. Así que no es de extrañar que vuelvan otra vez al escenario dos monólogos clásicos y eternos: El Lazarillo de Tormes de la exitosa versión de El Brujo y Fernán Gómez (los lunes en el Teatro Cofidís de Madrid) y El Buscón, de Quevedo, encarnado por Jacobo Dicenta (recién estrenado en el Infanta Isabel). No escaparemos de la picaresca porque va en nuestro ADN, dicen.



Una vez

Y por breve tiempo

Hace mucho tiempo

Tú y yo

Fuimos de pronto hasta muy adentro

Nosotros.



(José Emilio Pacheco). Faltan también ya Gelman, Grande, Ortiz...