Image: El tiempo de los monstruos

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Opinión

El tiempo de los monstruos

24 julio, 2015 02:00

Escandaloso. Pasaban unas horas de la publicación mundial de Ve y pon un centinela, la secuela de Matar a un ruiseñor "milagrosamente" recuperada medio siglo después, cuando Tonja Carter, la abogada sin escrúpulos de la octogenaria Harper Lee anunciaba que entre los manuscritos de la autora podría haber una tercera novela a modo de puente argumental entre los dos libros anteriores. Toda operación editorial se repite así dos veces: primero como tragedia y después como farsa.

Un año más volví a la Semana Negra de Gijón bien camuflado, no como el acosado Chus Visor, que se paseó impasible junto a las casetas mientras algunas exaltadas avisaban en las redes de su presencia. Y tampoco en esta edición, junto a las multitudes que escucharon a Rosa Montero, Muñoz Molina y Dolores Redondo, faltó la anécdota, esto es, el concierto o así del grupo La Bande, uno de los más destacados de Asturias, que denunció los fallos de la organización y el poco respeto hacia su trabajo interpretando en calzones una única canción como protesta porque en la carpa no había ni micrófonos.

Tenía perdido al teatrero Antonio Álamo hasta que me lo encontré en las tablas de Almagro con Tres monjas y una cabra, una original obra con textos de tres monjas -Marcela de San Félix, Hrotsvitha de Gandersheim y Juana Inés de la Cruz- en la que sus protagonistas rompen la clausura para proclamar al mundo sus versos. Lo que seguramente no saben es que, a la vuelta del verano, estrenará en Avilés Juanita Calamidad, una suerte de anti-Yerma que dará que hablar.

Si en una película se reúnen Javier Cámara, Candela Peña, Carmen Machi y Julián López lo más probable es que nos encontremos ante una comedia. Pues sí, Félix Sabroso los ha reunido para El tiempo de los monstruos, una nueva entrega del director en cuyo guión participó Dunia Ayaso poco antes de su muerte y parte esencial del tándem autor de películas como La isla interior o El grito en el cielo. Cine dentro del cine con mucho humor y retranca. Avisados quedan.

P. D. Mis Rolling Stones anuncian gira, pero no musical. Será una monumental exposición en la galería Saatchi de Londres con objetos fetiche de toda su carrera que luego "rodará" por todo el mundo.