Image: Brexit sinfónico

Image: Brexit sinfónico

Opinión

Brexit sinfónico

1 julio, 2016 02:00

Ni siquiera la versión yanqui de También esto pasará (This Too Shall Pass, Hogarth Press), de Milena Busquets, saludada con entusiasmo por el New York Times Books Review, se ha librado. La autora de la reseña, Sharon Marcus, decana de Humanidades de la Universidad de Columbia, comenta que en la novela Busquets aprovecha el lenguaje para conjurar al pasado y la muerte, combinando sexo, frivolidad y un cierto aire intelectual a lo Alain de Bottom, en su efervescente mezcla de Erica Jong y Almodóvar, lo que me lleva a malpensar que la verdadera Marca España, al menos en Estados Unidos, sigue siendo, como en los 90... ¡Peeeeedrooooooo!

Una mano amiga desliza en mi papelera las novedades del próximo otoño de un poderoso grupo editorial. La envían, me cuenta, con este lema: "Youtubers, políticos, famosos, viners... ¿Quieres conocer nuestros próximos libros de No Ficción?". Les ahorro su respuesta. Y es que hay preguntas que es mejor no hacer. Yo sólo planteo esta: ¿acaso no tienen ensayistas de fuste que llevarse al catálogo?

París no se acaba nunca, dicen. Pero, ¿y sus artistas? Me doy una vuelta por varios museos de la ciudad y me encuentro en el Pompidou una revisión del movimiento beat de los Kerouac, Ginsberg, Corso y Burroughs, desde todos sus espectros creativos, y en el Palais de Tokyo una muestra de fotos de Houellebecq. Una gozada ver cómo los museos salen del "abc del arte". Aunque ese entusiasmo se me cae al suelo cuando veo los museos más cercanos, como el Casal Solleric de Palma de Mallorca, que le dedica una exposición a las Huellas de la tramuntana. Toma ya. Que no se diga que no hay aire fresco en nuestras instituciones culturales... Me quedo tiritando.

Las orquestas inglesas son una presencia constante en las programaciones de nuestras promotoras de conciertos. En Ibermúsica, por ejemplo, nunca fallan las principales formaciones de Londres. Alfonso Aijón me contaba que la razón era sencilla. Aparte de que dan mucho lustre a cualquier cartel, están siempre deseando venir. España les motiva especialmente y, dado su escaso respaldo público, necesitan hacer caja a base de bolos. Vamos a ver/oír si el Brexit no tiene también su impacto en nuestros auditorios.