Luna Miguel

El poeta Pablo García Casado recuerda en su muro de Facebook que su libro Las afueras cumple 20 años. A los lectores de poesía de este país no hará falta recordarles lo que aquel poemario supuso no ya para el mundo poético, sino para la modernización y la creación de nuevos debates en el ámbito literario español. Aunque en los últimos días parece que este debate quedaba debilitado -la llamada poesía de Internet llenaba más bocas que la celebración de libros interesantísimos que se estaban publicando en ese momento- lo cierto es que 20 años después continúan ocurriendo cosas verdaderamente esperanzadoras.



Y es que los finales de los 90 no sólo fueron los años de Las afueras, ni tampoco de publicaciones revolucionarias como la antología Feroces. En aquella época, aunque nosotros no pudiéramos saberlo, estaban naciendo, desperezándose en sus cunas o chupando el pezón de sus madres los poetas que hoy vienen a tomar el relevo, aquellos que ni siquiera recordarán el año 2000, porque su poesía y su vida misma ya son fruto del siglo XXI. Hablo de autores como el español Rodrigo García Marina, nacido en 1996, que con 18 años ya había publicado La caricia de las amapolas, o como el argentino Pablo Romero, de 1999, autor de Los días de Babel, o incluso como la peruana Valeria Román Marroquín, nacida también en 1999 -aunque deteste hablar de su fecha de cumpleaños-, cuyo primer libro Age of consent se ha publicado en Perú y España al mismo tiempo, y cuya obra ya es celebrada por buena parte de la crítica hispanoamericana. Además de estos nombres, cabría citar los de Paola Valencia (Venezuela, 1997), Yerko Ostap (Chile, 1996), Alexandra Espinosa (Colombia, 1995) o Irati Iturritza (España, 1997).



¿Serán todos ellos los "Feroces" del nuevo siglo? ¿Serán sus libros y sus versos los que brillen y luchen desde las nuevas afueras? Quién sabe. Mejor lo hablamos en 20 años.



@lunamonelle