Image: Buenos libros para acabar

Image: Buenos libros para acabar

Opinión

Buenos libros para acabar

15 diciembre, 2017 01:00

Agustín Fernández Mallo

Palos de ciego (Círculo de Tiza) de David Torres. No ficción en la que el autor nos cuenta que tuvo un hermano mayor, asombrosamente también llamado David, muerto prácticamente al nacer en 1965 en una sórdida clínica madrileña. También nos cuenta el supuesto exterminio a cargo de Stalin de cientos de trovadores ucranianos ciegos porque sus cantos eran considerados amenazadores para el Régimen. Con estos materiales, que ya son oro de por sí, David Torres demuestra ser uno de nuestros más sólidos novelistas cuando en una pirueta sólo apta para gigantes construye asombrosos vínculos entre la intimidad de un niño de un barrio de Madrid y los acontecimientos soviéticos que han marcado el destino de Occidente. Sabiduría histórica y disección sentimental de nuestro presente inmediato. Salimos de esta novela sintiendo que, como los ciegos, hemos visto más, hemos tocado una misteriosa materia: el doble muerto y vivo que llevamos con nosotros, la Historia de los pueblos que la memoria edifica al mismo tiempo que traiciona.

Lejos de todo (Jekyll y Jill) de Rafa Cervera, plantea un hipotético viaje que de incógnito David Bowie habría hecho a Valencia en el verano de 1976. De un modo verosímil y atractivo introduce al músico británico en esa ciudad, quien entre otras cosas buscará cuadros de Goya en la Catedral y como un antropólogo adentrado en tierra ignota experimentará con su más cotidiano tejido. Paralelamente se relata con firmeza narrativa y vivísimos matices el despertar de un joven valenciano a ese nudo indescifrablemente que es la adolescencia, quien de algún modo se cruzará con Bowie en esas calles. Consigue el libro algo que sólo un verdadero relato puede alumbrar: ver un lugar conocido con los ojos de un personaje al que nunca hubiéramos imaginado estar ahí. Valentía y riesgo en este gran debut de Cervera en la novela.

@FdezMallo