Entre los muchos centenares de profesionales del periodismo que han trabajado conmigo a lo largo de los años, ocupa lugar destacado Cristina López Schlichting. Tiene una pluma transparente, habla como los ángeles, es sagaz, incisiva, moderada y prudente. Con paso firme, se ha mudado a la novela. He leído Los días modernos con interés y no poca sorpresa. La novela está construida desde la modernidad literaria. La vida de Amelia, niña de diez años, transcurre en la España oscura de las postrimerías de la dictadura franquista. Los personajes secundarios aparecen dibujados de forma precisa. Algunos son muy divertidos. Las preocupaciones de la protagonista, que todavía juega con muñecas, se describen desde la ternura. Cristina López Schlichting narra los amores infantiles de Amelia y Chema con especial delicadeza. Una novela, en fin, que es un recreo para el buen gusto literario.
* * *
Lo de menos, sin quitarle importancia, es que Angus Deaton ganara el Premio Nobel de Economía. Lo de más, es que su libro El gran escape, certeramente traducido por Ignacio Perrotini y Fausto Trejo, permite entender el alcance incierto de la globalización y los problemas que genera la riqueza, por un lado, y las desigualdades, por otro, que cada vez son mayores. Desigualdades que van desde la salud a la alimentación, desde la vivienda a los derechos laborales, y que condicionan la calidad de vida. Los países ricos son cada vez más ricos y se distancian a grandes pasos de los desfavorecidos. Pablo VI, en la Populorum progressio, y Juan Pablo II, en la Sollicitudo rei socialis, se adelantaron a Angus Deaton y establecieron como el gran reto para el siglo XXI alcanzar la justa distribución de la riqueza mundial. Angus Deaton no es optimista ni pesimista sino realista. En su libro traza sin compasión, incluso con crueldad, la realidad económica del mundo que vivimos y la voracidad de unos pocos frente a los más. Se comprende que El gran escape haya sido reconocido por la crítica internacional más solvente como el mejor libro económico del año.
* * *
No suelen gustarme los libros escritos sobre personajes públicos cuando ocupan el poder. Generalmente son hagiografías o libelos. Alejandra Ruiz- Hermosilla y Gabriela Bustelo, sin embargo, han publicado una obra sobre Soraya Sáenz de Santamaría que destaca por la objetividad. Las autoras han mantenido conversaciones con los amigos y los enemigos de la vicepresidenta del Gobierno, han escudriñado en su vida y en su pensamiento, han recabado testimonios y opiniones de intelectuales independientes. El resultado es un libro espejo. En él se refleja, tal y como es, la mujer que ha acumulado más poder en la moderna historia de España. Los antisorayistas a tumba abierta, y los sorayos que matan por ella, desfilan por este libro en el que se desvelan almuerzos secretos, cenas en la penumbra, conversaciones enmascaradas, las sombras de Aznar y las realidades más controvertidas de Rajoy, así como la victoria de Soraya sobre Esperanza. No se arrepentirá quien dedique este verano unas horas a leer el libro de Alejandra Ruiz-Hermosilla y Gabriela Bustelo.
* * *
Guillermo Dañino se ha adentrado en el inmenso y frondosísimo bosque poético de la dinastía Tang y ha espigado cien poemas entre los incontables de calidad producidos durante los siglos VII, VIII, IX y X, es decir, la época de oro de la poesía china. Li Bai (es decir, Li Po o Li Taipe), Du Fu (es decir, Tu Fu) o Wang Wei desfilan en este libro zarandeado por los hermosos vientos del aliento lírico. Junto a ellos, otros treinta y ocho poetas seleccionados por la sabiduría de Guillermo Dañino permiten al lector disfrutar de los versos producidos en una de las épocas más fecundas de la lírica mundial. Los emperadores de la dinastía Tang se arrodillaron ante la poesía y consiguieron que brotara en la China inmensa la devoción popular por el verso y la belleza.