Es evidente que, en gran parte, el cloud computing no podría ser una realidad tal y como es hoy en día si no existieran dispositivos móviles tales como smartphones y tablets. Y por ello, el crecimiento vertiginoso en la venta de smartphones hace que las empresas que viven de la nube se froten las manos. Hoy vamos a analizar a dónde nos está llevando todo esto, cuál es el futuro inmediato de estos dos hermanos tan bien avenidos…
Dropbox, Google, Spotify, Instagram, Onlive, Lacie… Son muchas empresas las que empiezan a tener grandes réditos por sus negocios en la nube (en algunos casos todos sus réditos) y como podéis observar, en ningún caso vemos un patrón repitiéndose, el cloud computing no sirve sólo para una cosa: almacenamiento, S.O., música, fotos, juegos, seguridad… ¿Qué sentido tendría si no tuviéramos la necesidad de estar en movimiento, de tener todas estas herramientas y/o entretenimientos en movilidad? Pues mucho menos, en este caso, sí que estaríamos hablando tan sólo de almacenamiento, y aún así pese a limitarnos a ese aspecto, perdería casi todo el sentido.
Muy relacionadas con este tema son las palabras de Randall Stephenson, CEO de AT&T, ayer mismo al hablar de planes de únicamente datos para smartphones en los próximos dos años. ¿Os lo imagináis? Yo perfectamente. Lo hemos visto recientemente con las ofertas de Free en Francia o Yoigo en España. La voz empieza a depreciarse (o empiezan a depreciarla) y eso nos llevará inexorablemente a que pase a ser fundamentalmente VoIP. Si a esto le sumamos la velocidad de crecimiento del consumo de datos móviles (se duplica año a año, y se va acelerando más y más), entendemos este postulado del jefazo de la telefónica americana.
Vamos ahora a echar un vistazo a una infografía que terminará de abrirnos los ojos sobre la íntima relación entre los smartphones y la nube y luego, seguimos destacando puntos sobre el tema:
Lo primero que se destaca es el futuro crecimiento del universo smartphone. En 2014, se venderán el doble de smartphones que de PCs mundialmente: 1000 millones, ahí es nada. Pero es que en 2016 ya serán 10000 millones de unidades vendidas, lo que supone 50 veces más de lo que tenemos ahora. En Estados Unidos, el 66% de los adultos tienen un Smartphone; en España, esta ratio es algo inferior, pero no por mucho (ronda el 50% y creciendo). Imaginaros lo que eso quiere decir…
La relación de Android con este fenómeno es más que evidente, sencillamente por el hecho de que exista una gama tan amplia de productos y precios. Un smartphone ya no es un iPhone, al que sólo unos pocos pueden acceder. Un smartphone puede valer menos de 100€ (libre) y con ello, pese a no ser la créme de la créme, podemos cubrir ciertas necesidades para el ocio o el negocio. Pensad si no: hace un par de años, ¿cuántos de tus amigos tenía un smartphone? ¿Dos? ¿Tres? Y de ellos eran Android, ¿cuántos? ¿Uno? ¿Ninguno? Y ahora, ¿tenéis algún amigo sin un Android o sin un iPhone? Se os hace raro, ¿verdad?
Entramos en el terreno de las aplicaciones, el que más recorrido tiene. Para 2015 se prevé que 4 de cada 5 proyectos de software tengan relación con apps móviles, dejando la restante para ordenadores. Esto hará que crezca la demanda de desarrolladores en un 302% en el caso de Android y un 220% en el caso de iOS. Y es que habrá un crecimiento del 90% del contenido actual al que habrá en 3 años.
Las apps migran a la nube por varios motivos: recortar costes, ganar en velocidad, la necesidad de tener lo mismo en múltiples dispositivos… Y esto nos está llevando a un modelo cloud basado en las PaaS (Platform as a Service) en vez de SaaS (Software as a Service). El futuro está en el cloud y es inevitable.
¿Tú qué opinas? ¿Los smartphones y la nube están aprovechándose del crecimiento de unos y otros o es casualidad? ¿crees que veremos planes únicamente de datos para smartphones próximamente? ¿es el cloud ya un driver de compra para ti?