El devenir de Motorola durante los últimos años no ha sido precisamente tranquilo. Los cambios del mercado que provocaron Android e IOS les ha hecho perder la enorme cuota de mercado hasta el punto de convertirse en un fabricante minoritario.
Motorola ha sido una compañía legendaria, y a pesar de las enormes pérdidas, siguieron contando con una cartera de patentes dignas de mención, motivos que impulsaron a Google lanzarse a la compra de la pionera Motorola, con rumores que apuntaban a convertirla en la marca de teléfonos de Google.
Motorola en el presente ¿Se encuentra gafada la compañía?
Motorola se encontraba en declive, y sin duda alguna, la compra de Google levantó las expectativas de la gente. Si Motorola y Google unían fuerzas, podrían fabricar el smartphone definitivo, pero esos no fueron los planes. Google se quedó con las patentes de la compañía, y se dedicó a mantenerla como si una empresa independiente fuera, suponemos que para no levantar celos de los fabricantes.
No obstante, fue durante la época en la que Motorola pertenecía a Google cuando asistimos a la resurrección de la mítica marca. Google siempre marca una serie de recomendaciones a los fabricantes para que puedan tener un mayor éxito, y en Motorola adoptaron todos esos cambios con unos resultados que seguimos disfrutando a día de hoy, con buen soporte de actualizaciones y un gran rendimiento gracias a Android Puro.
Aún así, Motorola seguía arrojando pérdidas, unas pérdidas que repercutían en Google, su empresa propietaria, por lo que decidieron vender la parte de Motorola que le estaba pesando a Google por 2.900 millones de dólares, una miseria en comparación con los 12.500 millones que pagaron por el paquete completo.
Lenovo compró la división de móviles de Motorola con un objetivo en mente, aprovechar el buen nombre de Motorola en occidente para llegar a los mercados donde la presencia de Lenovo en lo que respecta a la venta de smartphones es nula.
La inversión de Lenovo está pensada para mejorar la situación de la compañía a largo plazo, pero este tipo de estrategias no tiene ningún sentido si a corto plazo acaban arruinando a la compañía, y la compra de Motorola a día de hoy parece estar más cerca de lo segundo que de lo primero. Lenovo no solo no ha conseguido amortizar los 2.900 millones que tuvo que pagar a Google por Motorola, sino que además, le aporta más pérdidas que beneficios.
La estrategia de Lenovo
Los últimos datos financieros de Lenovo no han sido del todo positivos. La compañía ha atravesado el segundo cuarto del año con unas pérdidas netas de 714 millones de dólares, con una pérdida en el mercado de los ordenadores personales (su segmento más lucrativo) así como la existencia de un inventario de smartphones sin vender por valor de 300 millones de dólares.
La respuesta de la compañía no se ha hecho esperar, y es que para perseguir los tan ansiados beneficios, uno de los primeros movimientos que se hacen son las re-estructuraciones, lo que podemos traducir como una oleada de despidos. Es cierto que en ocasiones, las compañías contratan a más personas de lo que se pueden permitir, además de dar sueldos demasiado cuantiosos a gente que pueda no merecerselo, por lo que un saneamiento de las cuentas ayuda a librar a la compañía de cargas.
Pero este no es el único cambio necesario para vender más unidades, y es que para evitar una acumulación de stock sin vender como la que está sufriendo Lenovo es necesario disponer de una cartera de productos que tengan sentido en el mercado. Según afirma Lenovo, el mercado del smartphone es cada vez más y más duro.
La competencia cada vez ofrece mejores especificaciones a menor precio, y esta vertiente hace que tengas que reducir tus márgenes de beneficio hasta tal punto que una empresa pequeña puede sobrevivir con un éxito discreto, mientras que una gran compañía necesita vender auténticas millonadas de unidades para sacar beneficios. Esta estrategia tiene un riesgo para el fabricante, y es que para vender mucho, tienes que fabricar mucho, por lo que si el producto no sale como esperas, o lo vendes a pérdidas, o acumulas pérdidas de no venderlo.
La clave de una buena cartera de productos no implica necesariamente que debas producir gama alta exclusivamente, siendo el más que famoso Moto G un ejemplo perfecto, al tratarse de un terminal relativamente barato de fabricar del que Motorola puede permitirse sacar buenos beneficios aportando una experiencia de usuario y actualizaciones que compensan el hecho de no llevar un chip más potente.
Del mismo modo, tal y como nos contó Rick Osterloh, entrar en el mercado de la más alta gama requiere una enorme inversión en marketing que anula gran parte de los beneficios, mientras que la alta presencia de marcas más grandes hace que sea un terreno lleno de riesgos.
Lenovo y Motorola están uniendo sus equipos de desarrollo en la actualidad, y por nuestra parte opinamos que si la compañía china quiere volver a los beneficios que disfrutaba antaño no solo debe saber enfocar su cartera de productos, sino no olvidar en ningún momento que si cuidas bien a tus clientes, estos te recomendarán y repetirán contigo, por lo que lo que debe de haber segmentos en los que recursos humanos no debería pasarse con la tijera.
Uno de los primeros movimientos que hemos visto de la reestructuración de Lenovo es Zuk, su nueva marca de gama alta premium, aunque no el único, ya que Motorola será la responsable de diseñar y fabricar todos los teléfonos de Lenovo. Sobre este movimiento, aún no conocemos demasiados detalles más allá de la filtración del primer retoño de esta unión, aunque suponemos que será durante el próximo CES de las Vegas cuando conozcamos más detalles sobre la nueva línea de productos.
¿Creéis que la vida está siendo injusta con Motorola, o que es algo que se han buscado por su cuenta?
Más información | Informe económico de Lenovo