Google eliminará la marca Nexus: mucho más que un cambio de nombre
La posible desaparición de la marca Nexus puede tener múltiples implicaciones, incluyendo un cambio de filosofía de Google con sus smartphones.
31 agosto, 2016 12:59Hace tiempo que Google tontea con la idea de acabar con la línea Nexus. Se trata de una marca muy querida por un determinado público -mi primer contacto serio con Android fue con un Nexus 4, que me hizo abandonar iOS- pero lo cierto es que nunca ha llegado al gran público de forma masiva. Ahora, cuando estamos muy cerca de conocer los nuevos terminales fabricados por HTC, resurgen los rumores acerca de que, en realidad, estos no serían Nexus en absoluto.
Así lo asegura Android Central, que apunta a que estos terminales no mostrarán tampoco la marca HTC, solo Google. Es decir, ocurriría todo lo contrario que con los dispositivos Nexus, que muestran la marca del fabricante y el logo de la gama, pero donde el logo de Google no aparece más allá de la pantalla de arranque de Android.
Una mayor presencia de la marca Google
Con esto es evidente que Google quiere potenciar la vinculación de su marca con la de los dispositivos. Su marca es posiblemente una de las más potentes del mundo, lo cual puede hacer los terminales tremendamente apetecible de cara al usuario medio. Esto podría ayudar a que los terminales de Google crecieran tremendamente en ventas.
Pero el abandono de la marca Nexus -si finalmente se abandona, porque podrían convivir ambas líneas- no implica únicamente sólo una nueva estrategia de branding, de hecho llegaría con muchos cambios de la mano, que podrían hacer tambalearse los cimientos del mundo Android.
Desaparición de la marca Nexus: Alejándose de Android puro
Hasta ahora, la marca Nexus iba vinculada a la experiencia de Android puro. Nexus era sinónimo de Android sin añadidos, sin adulterar, sin capas de personalización ni salsas raras. Android recién salido del horno. Esto podría cambiar con los nuevos terminales de HTC, que según apuntaron Evan Blass y Android Police contarían con un launcher ligeramente distinto al que nos tiene acostumbrados.
A eso hay que añadirle que desde hace meses se viene hablando de que Google estaría planeando servicios exclusivos para los usuarios de sus teléfonos -como almacenamiento ilimitado en Google Photos para imágenes sin comprimir-, ofreciendo todavía más incentivos para comprar sus terminales. Esto es un cambio total de filosofía.
¿En qué posición dejaría a otros fabricantes?
¿Qué pretende Google con este movimiento? Android nació como una plataforma de código abierto y con el tiempo, Google ha perdido el control sobre él, y lo más posible es que no pueda recuperarlo. Con todo, ha tratado de hacerlo, moviendo cada vez más funciones del núcleo de Android (software libre) a Google Play Services (software propietario), mientras que muchos fabricantes optan por tocar cada vez menos el código de Android y se limitan a meter su launcher y sus aplicaciones.
Pero lo más importante es que este movimiento podría trastocar la relación entre Google y muchos fabricantes. Hasta ahora, el la gama Nexus tenía un punto de proyecto de vanidad, muy buenos teléfonos cuyo impacto en el mercado era mínimo. Los fabricantes y Google eran socios.
Una entrada más agresiva de Google en el mercado -y todo apunta a que se centraría en la gama alta y media-alta- haría que muchas marcas pasasen a ver Google como competencia, y las consecuencias de eso pueden ser imprevisibles. Si bien Android está demasiado asentado en el mercado de los smartphones como para que una desbandada, Android Wear y Android TV están sufriendo más de lo esperado para encontrar un hueco.
HTC: Algo termina, algo comienza
HTC fue el primer fabricante en fabricar un terminal Nexus y será el primero en hacer lo propio de esta nueva etapa de Google. No deja de ser algo poético. A partir de ahora Google no solo pondrá el software a los teléfonos, sino que tendrá mucho que decir en el diseño de este, algo en lo que puede tener algo que ver el fichaje de Rick Osterloh, el ex-CEO de Motorola responsable de estos últimos grandes años de la marca.
Un mayor control y la marca de Google sobre el terminal hará que mucha gente defina a los nuevos teléfonos como «el iPhone de Google», aunque al final puede darse que esa definición no sea correcta en absoluto. Sin embargo, es un concepto potente y que seguro que acaba cuajando, entre el público. Y eso es una auténtica bomba.