La semana pasada ya vimos cómo las primeras unidades de Ouya, la consola basada en Android, llegaban a sus propietarios, los desarrolladores que se encargarán de que cuando finalmente llegue al mercado tengamos varios juegos disponibles. Después de los unboxing de rigor, toca echarle un vistazo a la interfaz y el funcionamiento del dispositivo en sí, gracias a los desarrolladores de Code Zombie Games.
Como un mensaje continuo no duda en recordarnos, se trata de una versión sin terminar que podría tener diferencias respecto a la final, pero podemos adivinar algunas de las premisas del diseño. Vemos que la interfaz tiene un diseño muy limpio, con predominancia de colores y efectos simples, y prácticamente no hay nada de parafernalia que moleste o distraiga. El teclado en pantalla tiene un diseño monocromo bastante elegante, y en general Ouya presenta un diseño bien pensado y limpio, curiosamente lo contrario de lo que me viene a la cabeza cuando veo la consola en sí.
Por ahora, el único indicativo de que Ouya usa Android son los menús emergentes que aparecen de vez en cuando, y el navegador web, que aún usa el estilo Holo. Igualmente, la configuración de ciertos elementos como la conexión Wifi es la misma que la de cualquier otro dispositivo. Por último, podemos ver en funcionamiento un juego para Android, Deadly Dungeons. Es evidente que, al ser un juego creado para smartphones, la relación de la imagen no es la correcta, y ciertos elementos gráficos no encajarán bien, pero por lo demás funciona perfectamente. Es de suponer que aquellos juegos con versiones especiales para tablets se verán mejor en un televisor, además de los creados con la consola en mente.
También podemos volver a repasar en otro vídeo los componentes que han recibido los programadores. Sigue sin gustarme la aparente baja calidad de los materiales, especialmente el mando, pero es de suponer que los usuarios recibiremos algo mejor. Esa es la sensación que me provoca Ouya por ahora: veo cosas interesantes, pero aún soy algo precavido en lo que respecta a su posible éxito una vez llegue al mercado.
El punto positivo es que Ouya ha iniciado un movimiento muy interesante, con otras compañías sumándose a crear dispositivos que aprovechan la filosofía abierta de Android para llevar los juegos a los televisores de todo el mundo.