En una época donde el cine de animación está dominado por Pixar, Universal ha dado un auténtico pelotazo con los Minions, esos amarillas criaturas a las que conocimos como secuaces de Gru y que ya llevan recaudados más de mil millones de euros con su aventura en solitario. Y evidentemente, Android no se iba a quedar sin su ración de torpeza y adorabilidad y recibe Minions Paradise.
El juego nos lleva a unas vacaciones de los Minions durante un accidentado crucero en el que el ambarino ejército de Gru acaba naufragando en una isla tropical. En la piel de Phil, culpable del incidente que da con los huesos del grupo en la isla, deberemos organizar el entretenimiento para que nuestros compañeros no se enfaden con nosotros.
El juego sigue el típico esquema de construcción que hemos visto en cientos de juegos desde SIMs hasta Dragon Vale, en el que deberemos ir edificando y mejorando las atracciones para que los Minions pasen unas buenas vacaciones, creando desde bares tropicales hasta piñatas, toboganes. El juego tiene un aspecto visual notable, tremendamente colorido como merecen los Minions perdidos en una isla tropical, y todo está aderezado con divertidas animaciones de los personajes, cuya presencia el juego capitaliza de forma estupenda.
La descarga del juego es gratuita, pero incluye compras in-app. Como la mayoría de juegos de este tipo, a medida que avancemos los tiempos de espera de las construcciones y acciones se irán haciendo más y más largos, obligándonos a dejar que pase el tiempo o bien haciéndonos soltar una de esas monedas que tardas mucho en conseguir a menos que pases por caja. EA, la editora del juego, es una habitual de este tipo de monetización en juegos free-to-play, como vimos en los SIMS.
No se puede decir que Minions Paradise sea un juego innovador, pero usa una fórmula que se ha demostrado que funciona y cuenta con los Minions como gran baza de venta, y desde luego no es una mala baza.