Por fin tenemos entre nosotros al OnePlus 2: amado por muchos, odiado por otros tantos, pero una atractiva alternativa a los buques insignias de siempre. Y, si queréis ser de los primeros en saber cómo es el nuevo dispositivo de OnePlus de cara a las primeras invitaciones del 11 de agosto, os dejamos nuestras primeras impresiones al tenerlo en nuestras manos.
Los chicos de OnePlus no han estado exentos de críticas en el lanzamiento de su último dispositivo, por no hablar del infame sistema de invitaciones, pero lo cierto es que cada vez el OnePlus 2 está más cerca de nosotros: un dispositivo con una hoja técnica de lo más potente que ha conseguido levantar una buena cantidad de hype incluso antes de su lanzamiento, algo destacable al estar hablando de una empresa tan joven en el panorama internacional. Tienen sus luces y sus sombras, y unas ambiciones un tanto altas, pero hasta ahora lo han estado haciendo bien.
OnePlus 2: toda la información sobre el nuevo “flagship killer”
Lo cierto es que el OnePlus 2 del que hablamos parece prometedor sobre el papel, pero las mejores conclusiones son las que sacamos cuando tenemos el dispositivo en nuestra mano. Para poder deciros de primera malo todo lo bueno -y lo malo- que viene en este nuevo dispositivo, nos hemos hecho con una unidad de pruebas del OnePlus 2, como ya os hemos adelantado en Twitter e Instagram, y pasamos a comentaros nuestras primeras impresiones.
Un diseño que destaca, USB Type-C y sensor de huellas incluido
No debería ser una sorpresa, después de todo el bombo que se le ha dado, pero el diseño quiere ser uno de los toques distintivos de este OnePlus 2: marcos metálicos, frontal completamente hecho de cristal, y una parte trasera con carcasas intercambiables, aunque el tacto arenoso de la carcasa incluida en el conjunto es de lo más agradable.
Es más, cada vez que alguien coja vuestro teléfono, será lo primero que notará y te comentará. El marco superior podría ser un tanto más pequeño, y se os hará un poco grande y pesado si ya estáis acostumbrado a terminales más pequeños (que ronden las 5 pulgadas de pantalla). Pero, como con los dispositivos «monstruosos» de seis pulgadas, todo es cuestión de acostumbrarse a manejar un tamaño más grande.
Pasando a esos pequeños detalles que desde OnePlus han querido destacar, el uso del USB Type-C es curioso cuanto menos: el ser reversible le da utilidad, más cuando OnePlus pone a nuestra disposición ese cable plano con el conector USB también reversible. La pega que le saco es simple y se encuentra en la velocidad, dado que el USB 2.0 se queda muy atrás en comparación a la especificación 3.0, algo que me parece imprescindible a día de hoy, y que se nota mucho cuando estás transfiriendo grandes cantidades de archivos. También corta otras posibilidades como utilizar una pantalla externa, aunque eso es otra historia.
Pasando al sensor de huellas, y probándolo en los desbloqueos (también cuenta con opciones como double-tap para despertar la pantalla), su velocidad es destacable, y hace que nos olvidemos de claves y patrones. Además, permite almacenar hasta cinco huellas para ese desbloqueo, así que podemos guardar diferentes dedos o diferentes personas, según nuestras necesidades. Pero, la pega está donde todos sabéis: no contar con NFC, algo imprescindible cuando Android Pay está a las puertas de su lanzamiento, y que quita parte de su propósito al sensor de huellas.
El botón lateral también tiene su miga, porque no podemos cambiar el estado del sonido por software: tenemos que usar ese botón deslizante, nos guste o no. La posición inferior es para todos los sonidos, la intermedia para el modo prioridad, y la superior para sólo escuchar las alarmas que tengamos programadas. Vamos, los ajustes que se introdujeron en Android Lollipop. Es un dolor de cabeza si se rompe, aunque es la solución que OnePlus ha empleado para que el software no pueda anteponerse a la posición de ese botón.
Una pantalla que luce bien a primera vista
5.5 pulgadas y resolución FullHD: muchos habéis visto este movimiento como el adecuado, pero otros tantos lo habéis criticado de cara al futuro, y no os faltan razones. Lo cierto es que, a modo personal, me posiciono en el primer grupo: considero que una pantalla 1080p es perfecta hasta llegar a las seis pulgadas, ayudando a apartados como el rendimiento y autonomía. Aunque tendremos que esperar a nuestro análisis exhaustivo para saber con certeza que es la elección perfecta, pero eso es otra historia.
Si teníais miedo de que se repitiera el caso de las pantallas amarillentas, y por lo menos con nuestra unidad de prensa, podéis estar un tanto más tranquilos: la pantalla no parece tener tonos amarillentos, ni ninguno que predomine sobre el resto de forma anormal. El panel IPS-NEO es una apuesta sobre seguro en definición de colores, y los ángulos en los que la pantalla es visible tampoco decepcionan, como es propio de estas pantallas.
Oxygen OS: en el buen camino, pero falta trabajo
A la hora de escribir este análisis, nuestro OnePlus 2 está funcionando con una versión preliminar de Oxygen OS 2.0: según OnePlus, es la experiencia más cercana a la que recibirán los primeros propietarios de un OnePlus 2 en cuanto actualicen a la primera OTA, que saldrá el 12 de agosto. Aun así, y con el paso de las actualizaciones, todo lo comentado en estas líneas puede variar.
Llegamos al apartado del software, otro de los aspectos que más sorpresas parecía augurar: en el primer OnePlus tuvimos una colaboración con Cyanogen, que se fue al traste cuando Micromax les hizo la cama en India con un contrato de exclusividad. Todo esto ha causado que nos encontremos con Oxygen OS, una capa desarrollada por OnePlus para darle ese toque distintivo al OnePlus 2 (y sustituir a CyanogenMod en el OnePlus 1) que necesita para luchar contra el resto.
Lo cierto, y por suerte para todos aquellos que disfruten con Android puro y duro, traemos buenas noticias: OnePlus se ha limitado a mejorar Android con su capa de personalización, no ha intentado hacer su propia versión de Android. Y lo cierto es que los detalles con los que cuenta (gestos con la pantalla apagada para diferentes acciones, botoneras en pantalla desactivando las físicas, y un largo etcétera que detallaremos en el análisis) son muy útiles, es una capa de personalización que cumple perfectamente con su cometido, y que no molesta con el funcionamiento normal de Android.
Respecto a su rendimiento, no hace falta que os detallemos el funcionamiento de Lollipop: funciona sin problemas, dándonos una experiencia algo cercana a la que Google quiere homogeneizar. También contamos con todas las aplicaciones de Google preinstaladas. Aunque, y supongo que por tratarse de una versión temprana, algunas aplicaciones no se llevan bien con el OnePlus 2, y hacen que nos encontremos con lentitud hasta que forcemos el cierre.
Y, respecto a ese sobrecalentamiento por el que el Snapdragon 810 se ha hecho tan conocido -y después de que OnePlus afirmara haber dado con la solución-, tengo buenas y malas noticias: bajo uso intenso se calienta, aunque no lo hace más que otros dispositivos que ya está en el mercado, y con una temperatura ambiente más que alta. Y, aunque cuenta con más de 15 sensores internos para medir la temperatura, dan valores «raros» a primera vista, por lo que tendremos que analizarlo más a fondo para llegar a conclusiones exactas.
Una cámara que consigue cumplir
La cámara, otra de las cosas que también han dado de qué hablar: una cámara que utiliza el enfoque láser para conseguir unas velocidades de enfoque de escándalo (y las consigue, comprobado), y que cuenta con un sensor que, en teoría, beneficia a las fotos tomadas con poca luz. No seremos los primeros que os traigan fotografías tomadas con el OnePlus 2, pero aquí tenéis una buena muestra de lo que es capaz la cámara del OnePlus.
Si me preguntáis a mi, y después de haber sacado unas cuantas fotografías en diferentes condiciones, pienso que es una muy buena cámara, pero que no llega a ser espectacular. En cualquier caso, en nuestro análisis tendréis las conclusiones finales.
En cuanto a la aplicación de cámara, hay que decir que funciona a las mil maravillas, y cuenta con unos cuantos modos de hacer las cosas, pero echo en falta ajustes más avanzados para todos aquellos que saben un poco más de fotografía. Es algo que se puede solucionar con una aplicación de terceros, o con una actualización, pero que echo de menos a la hora de probar la aplicación de cámara del OnePlus 2.
¿Será el ‘flagship killer’ que prometían?
Si habéis entrado a este artículo buscando una respuesta a si es el flagship killer que nos prometieron, siento no poder dárosla ahora mismo: se necesita más tiempo en un uso diario para poder alcanzar esa conclusión, no basta con unas pocas horas con el dispositivo. En cualquier caso, os animamos a leer el análisis completo que estamos preparando para obtener esa respuesta.