Ayer Google presentaba el nuevo Chromebook Acer C7. Se trata del sexto de esta familia. Sí, el Acer C7 es el Chromebook 6 y, vistas sus características, no os extrañaréis del título del artículo. Vamos al meollo.
Para los que desconozcan el mundo Chromebook, Google anunció hace dos años su sistema operativo Chrome OS con la idea de funcionar completamente en la nube, aunque posteriormente tuvo que reducir la presencia de la nube en sus portátiles. Editar con Google Docs (actualmente Google Drive), correo Gmail, Google Music, navegador Chrome… En su momento pareció una idea extraña. A día de hoy más bien esperpéntica, dado que las tablets cada vez cubren cada vez más esas funciones.
Vamos que trae el nuevo hijo de Google:
- Procesador Intel Core (sin más detalles de momento)
- 320 GB de disco duro
- 100 GB gratis de Google Drive
- Aplicaciones de Google preinstaladas.
- Multiusuario
- 3 puertos USB
- Salida HDMI y VGA
- 1.3 kilos
- 11.6’’ de panatall y 1″ de grosor
- Doble antena Wi-Fi y entrada Ethernet
- A partir de 199$
No pinta mal, hasta que llegamos a la batería. Google habla de la batería muy por encima con una sencilla frase de unas 3.5 horas de batería. No, no es un error de escritura. ¿Se ha vuelto Google loco? Probablemente es más bien un intento de sacar un Chromebook barato, para aquellos que necesitan un ordenador para poca cosa y casi ni desenchufarlo. Si se le echa imaginación puede usarse como centro multimedia (con su salida HDMI), y os animo a que encontréis otros usos y nos los contéis en los comentarios.
Chrome OS, Android y los portátiles
Hemos comentado anteriormente que tal vez Google apunta a una unión entre Android y Chromium OS (sistema operativo en el que se basa Chrome). Originalmente Chrome se basaba solo en el navegador y se ha ido acercando a su hermano añadiendo a posible control táctil, apps, ventanas… La cuestión es, ¿qué tiene Chrome OS que ofrecer a Android? Los que habéis usado un dock como los que nos tiene acostumbrados la serie Transformer de Asus sabéis que ya tenemos tablets Android con un teclado más que aceptable para escribir y algunos de los atajos a los que estamos acostumbrados en nuestros ordenadores. Si a eso añadimos que Drive se continúa actualizando y el año que viene tendremos Office, ¿qué queda?
Queda mejorar, mejorar y mejorar. La navegación web de Chrome en tablet tiene mucho que envidiar a la de escritorio (cosa que sí podría coger de Chrome OS), así como editores para textos menos usuales como código informático o LaTex, multitarea (añadir de serie la pantalla dividida del Note 10.1), conexiones con periféricos y por último, pero no por ello menos importante, el espacio. Por mucho que Google insista en que usemos los servicios en la nube, muchos seguimos necesitando más de 32GB si queremos dar «el gran paso».
Aunque el tema del espacio tiene fácil solución, discos duros en el dock y/o las memorias que nos dice preparar Samsung en la parte de la tablet, la mayoría de programas que echaríamos en falta no dependen de Google. Así que los de Mountain View tienen muchos desarrolladores a los que motivar para conseguir que el cambio valga la pena. Pero tienen que motivar a los mismos (o tal vez más) para que el salto a Chrome OS sea planteable.
Así que mientras vemos como se desarollan estos dos SO, no dejéis de comentar sobre el C7, los chromebook, Android…
Fuente | Google Blog