Porque los usuarios lo piden: Google y Apple tienen cuentas pendientes con la TV
Android ya se ha introducido en varios aspectos de nuestra vida diaria. Los smartphones se han convertido en el centro de todo lo que hacemos, desde trabajo hasta el ocio. Cuando estos no son suficientes, las tablets nos ofrecen mas potencia y mejor tamaño para disfrutar de productos multimedia y juegos. Pero hay un elemento que, pese a los frustrados intentos de Google, aún resiste el influjo de los androides: el televisor.
No puedo recalcar lo suficiente la importancia estratégica de conquistar el mercado de los televisores. Son aparatos que ocupan las casas de la inmensa mayoría de la población, y aún hoy en día, con el auge de Internet y los medios de información alternativos, sigue moviendo miles de millones de euros. Tanto Google como Apple lo saben, y por eso desde hace unos años han creado nuevos sistemas basados en sus productos, pero que, por una razón o por otra, nunca han llegado a establecerse en el salón de las familias. Pero en los últimos días se han filtrado diversas informaciones al respecto de la ofensiva de Apple al respecto, y parece que van mas en serio que nunca.
Recientemente la compañía de Cupertino ha estado en contacto con diversos fabricantes asiáticos, como Foxconn y Sharp, para diseñar nuevos televisores, presumiblemente con la idea de entrar en el mercado con fuerza. Estos movimientos son una sorpresa por parte de Apple, ya que en el desarrollo normal de nuevos productos estos contactos no se producen hasta que Apple tiene un producto sólido en mente. Por tanto, podemos deducir que el Apple TV tal y como lo conocemos tiene los días contados, y será sustituido por un televisor con un sistema operativo de Apple, ya sea Mac OS o iOS.
Estos movimientos deberían preocupar a Google, ya que no sería la primera vez que Apple pilla desprevenidos a sus competidores. Desde que se anunció Google TV, la suerte que han corrido los distintos dispositivos que lo incluían no ha sido la mejor. La mayoría de estos productos se han quedado en los escaparates, y no han conseguido atraer a un público que quiere aumentar las posibilidades de su televisor, pero sin abandonar la sencillez de uso.
Google tiene muchas ventajas en esta batalla por la sala de estar, pero no es menos cierto que hasta ahora los intentos de Apple no eran mas que experimentos orientados a los seguidores de la manzana, globos sonda con los que aprender y recoger la información necesaria para meterse en un proyecto mucho mas grande. En cambio, Google TV tiene la ventaja de tener bajo su ala a muchos fabricantes distintos, la mayoría de ellos con vasta experiencia en la fabricación de televisores, como Sony o Samsung.
Pero aunque ya se estén dando pasos para integrar Google TV en los dispositivos de empresas como Samsung, donde Google puede dar la campanada es en el mercado de bajo coste. Es en este momento en el que productos como Cotton Candy, el miniPC integrado en un stick USB, podrían ser el arma secreta de Google. La minituarización de los diversos componentes de un PC como el procesador, y la constante bajada de costes abre la puerta a Google para promocionar este tipo de dispositivos que serían mas baratos que cambiar de televisor, y no tan aparatosos como dispositivos dedicados como los de Sony. Una Sony que, por cierto, ni está ni se le espera.
Por tanto, Google tiene dos frentes abiertos para conseguir llegar a las televisiones. Por una parte, los dispositivos con Google TV integrado, que deberían llegar pronto a las tiendas para asentarse antes de que llegue la alternativa de Apple. Y por otro, los dispositivos dedicados, que irán bajando de tamaño y precio, perfectos para aquellos usuarios que quieran aumentar las posibilidades de su televisor. Próximamente en el Androide Libre hablaremos de los distintos sticks con Android que hay en el mercado, y que pueden ser usados como una versión barata de Google TV.