Desde que Google presentó Glass hemos tenido dos enormes dudas que han girado en torno a este proyecto. ¿Realmente es un dispositivo que vamos a usar? Y, si decidimos hacerlo y acabamos convencidos, ¿vamos a pagar el altísimo precio que parece que va a tener?

Efectivamente, la viabilidad de una gafas inteligentes y su precio son dos enormes dudas que siempre están ahí, y la segunda podría tener novedades muy interesantes. Jason Tsai, miembro del Instituto de Investigación Topológica de Taiwán, ha fijado el precio de las Google Glass en 299$, unos 223€ al cambio.

¿Cómo ha llegado Tsai a esta conclusión? Estudiando la estrategia de venta para Taiwán y los precios de producción que tendrían, especialmente la pieza clave fabricada por Himax Display Inc., que cuesta entorno a los 30$. A partir de ahí, echando cuentas y midiendo beneficios y viabilidad, la cifra final de venta al público queda en 299$.

Una de las claves de que este precio pueda llegar a ser real es que el producto funcione en los escaparates. Actualmente la tecnología de dispositivos inteligentes se limita casi exclusivamente a los smartphones, pero se espera que de los 200 millones de dólares que generan las ventas de dispositivos inteligentes para llevar puestos (gafas, relojes, ropa, etc…) se pasen a los 18.300 millones de dólares en 2018. De ahí la reducción con respecto al precio esperado, recordemos que las primeras unidades se vendieron a desarrolladores por más de 1.000$ y se esperaba que fuesen a costar como un smartphone de gama alta.

Estos 299$ no son más que una estimación, pero la idea detrás de todo el estudio es más que válida. Implantar una nueva tecnología, y más cuando supone un cambio tan radical, nunca es fácil. Vender unas gafas como las Google Glass es una tarea complicada, y posiblemente la única forma de hacerlo sea mediante fuertes campañas de marketing y precios asequibles para los usuarios. Cuando se vende poco de algo hay que subir los precios, pero si la demanda aumenta es fácil rebajarlos, de modo que se produce una retroalimentación constante en favor del precio para el usuario.

Esta es la idea detrás del estudio de Jason Tsai, que unido al precio de la pieza principal de Google Glass nos hace ver un poco más clara la luz sobre este dispositivo. Igualmente todavía nos cuesta mucho imaginarnos con unas gafas que nos muestran información en tiempo real y a las que hay que hablar para controlar. Pero todo es cuestión de costumbre, y no podemos darle la espalda a la innovación. Quizás no por 225€, pero un precio más razonable de los primeros que se han dicho sería muy interesante y nos hace ver las cosas de otra forma.

¿Os parece viable Google Glass? ¿Creéis que una rebaja así en el precio sería clave para su éxito?