Huawei asegura que actualizará sus móviles cada dos meses
Huawei da un paso importante en su política de actualizaciones: según ha anunciado en Australia, la compañía se compromete a actualizaciones bimensuales.
28 junio, 2018 14:23Las actualizaciones en Android son la eterna asignatura pendiente de nuestro sistema. Google se emplea a fondo con sus móviles y también con el propio Android; luego es cada fabricante el que estipula la entrega de las nuevas versiones. Algunos se comprometen a mejorar su política, algo que acaba de hacer Huawei: el fabricante asegura que sus móviles recibirán nuevo firmware cada dos meses.
El compromiso nos llega desde Australia, tal y como ha desvelado el medio Ausdroid. El compromiso de Huawei es en firme, tanto con las actualizaciones de sistema como con el desbloqueo facial, del que también ha asegurado que llegará a la mayoría de sus móviles con una antigüedad de hasta dos años. Se ha comprometido con los usuarios de Australia, pero debería de ser extensible al resto de territorios: una vez desarrollada la actualización lo habitual es liberarla en todos los dispositivos compatibles.
La primera actualización que reciban los móviles tendrá incluido el desbloqueo facial
Las palabras de Huawei en Australia ponen de manifiesto un claro interés por ofrecer a los usuarios la mejor experiencia posventa. Sabemos que las actualizaciones en Android son un tema polémico, de ahí que Huawei se haya mojado de manera tan clara. No sabemos los móviles que entrarán en la nueva política de actualizaciones bimestrales, eso sí. Tampoco si expandirá el compromiso al resto de países más allá de Australia.
Huawei ha ido actualizando a Android 8 Oreo una buena colección de sus smartphones, aunque no con demasiada celeridad y dejándose algún modelo por el camino. El desbloqueo facial es una de las novedades que se incluyen con las actualizaciones; e irá llegando a la mayoría del catálogo australiano, así lo asegura Huawei.
Comprometerse a actualizar los móviles cada dos meses implica que estos deberían recibir, como mínimo, las actualizaciones de seguridad. Esperemos que Android P no se retrase tanto como lo ha hecho (y está haciendo) Android 8.