Las multas de 5.000 euros por ver fútbol pirata por IPTV llegarán "pronto" y "España va en la misma dirección"
El máximo regulador de telecomunicaciones italiano se ha escudado en las recientes noticias provenientes de España para justificar las multas por ver IPTV.
13 marzo, 2024 17:48El gobierno italiano dio un golpe en la mesa que se escuchó en toda Europa el pasado verano, cuando anunció una ley ‘express’ contra la piratería; concretamente, contra una de las prácticas más comunes del país: el fútbol pirata por IPTV.
El resultado de esta ley fue un “nuevo y loco” sistema de bloqueo que obliga a las operadoras a evitar el acceso de los internautas al servidor pirata, apenas 30 minutos después de ser avisadas por los propietarios de los derechos y sin precisar de autorización judicial.
Aunque su puesta en marcha sufrió muchos problemas, con el bloqueo de páginas inocentes, el mero hecho de que funcionara ya era un gran logro teniendo en cuenta los plazos establecidos. Lo mismo no se puede decir de la otra gran parte de la ley: las multas por ver IPTV.
Las multas por ver IPTV llegan pronto
Pese a estar incluida en el texto, había serias dudas de que la posibilidad de multar directamente a los usuarios de servicios pirata se fuese a hacer realidad. Había muchos obstáculos, tanto legales como políticos, para poner en marcha semejante tarea en un país en el que el 25% de la población adulta consume contenido pirata, según los últimos estudios.
Ahora, esos obstáculos se están eliminando, y España parece tener parte de culpa. Massimiliano Capitanio, máximo responsable de AGCOM, regulador de telecomunicaciones, ha mencionado las últimas noticias provenientes de España como prueba de que se está creando un “frente común” en Europa frente a la piratería que “sólo puede ser bueno”. Además, cree que “España va en la misma dirección” que Italia.
Capitanio se refiere al polémico auto del Juzgado de lo Mercantil Número 8 de Barcelona, en el que daba el visto bueno a que LaLiga obtuviese la información de los usuarios de servicios pirata para poder reclamarles compensaciones económicas. Posteriormente se aclaró que el objetivo de la demanda era el llamado ‘cardsharing’ y los usuarios que venden u ofrecen el acceso a los partidos ilegalmente; pero el auto también permite la identificación de los usuarios finales, que hasta ahora no han sido perseguidos en España.
Esa es justo la intención de AGCOM: ir directamente a por los usuarios de servicios pirata, que “se creen que no les va a pasar nada”, en palabras de Capitanio; el ejecutivo quiere cambiar eso con una publicación en la red social LinkedIn, en la que ha explicado que las multas, que podrán rondar entre los 150 euros y los 5.000 euros, llegarán pronto.
También por descargar apps legales
Estas multas llegarán incluso si se usan servicios legales para acceder al contenido; el único requisito es que el contenido sea ‘pirata’ y vulnere los derechos del propietario. De hecho, Capitanio ha mencionado específicamente las apps que se pueden descargar de Google Play. En otras palabras, los usuarios podrían ser multados con hasta 5.000 euros por descargar y usar una app que la Calcio considere ‘pirata’.
Aunque Capitanio no ha dado una fecha concreta, sí que ha explicado cómo se ha solventado uno de los mencionados obstáculos: la identificación de los usuarios piratas. Al igual que ocurre en el caso español, el gran problema de multar a los usuarios está en tener que identificarlos, algo que normalmente requiere autorización judicial para proteger los derechos de privacidad recogidos en la ley de Protección de Datos.
Para solventar esto, Capitanio ha revelado un acuerdo entre la policía fiscal y la oficina del fiscal de Roma para facilitar la identificación de los usuarios sin autorización judicial para cada uno por separado. El proceso seguirá un nuevo protocolo que permitirá el acceso a los datos, incluyendo nombre y dirección para enviar la multa correspondiente. Los ingresos de las multas irían a las arcas del Ministerio de Justicia para luchar contra la piratería, y al Ministerio de Economía para financiar campañas publicitarias.