Se ha consumado la desastrosa participación del Barcelona Lassa en la presente edición de la Euroliga. Con el triunfo cosechado por el Anadolu Efes a domicilio frente al Zalgiris Kaunas, los de Bartzokas quedan apeados matemáticamente de la máxima competición europea. El fracaso es mayor cuando la eliminación llega con cuatro jornadas por disputarse aún.
Este hecho hace que el Clásico de este miércoles quede un poco descafeinado. El Real Madrid luchará por mantener el liderato de la competición y asegurar ser cabeza de serie el los cuartos de final. Mientras que los azulgranas tendrán que conformarse con intentar lograr un triunfo que les de una alegría pero que sería totalmente intrascendente para sus intereses.