A base de golpes

El Real Madrid necesitaba ganar como el comer. Los de Laso venían de dos derrotas en Euroliga y querían mantener intacto el liderato, más si cabe tras el triunfo de Valencia ante MoraBanc Andorra. La tensión era latente en el ambiente y la afición pedía a gritos un triunfo de categoría. Pasado el merecido homenaje de la grada  a Fernando Martín, el equipo merengue saltó a imponer su ley. (Así vivimos el partido en directo).

Tavares fue el principal dominador del cuarto inicial. Terminó con ocho de valoración e impidió que Balvin y Pasecnics se enchufaran rápido. Entre mates y tapones, el caboverdiano mantuvo la tranquilidad del lado merengue. Además, los de Laso pusieron ese ritmo al juego que tan bien les sienta. El contraataque se instaló sobre la pista mientras Gran Canaria sumaba desde la personal con Seeley y Balvin como principales anotadores. El 23-17 reflejaba la cómoda superioridad que estaba marcando el Madrid.

Los segundos diez minutos dieron mayor protagonismo a los tapados del Madrid, quienes se encargaron de aumentar una ventaja que poco trabajo les había costado hasta el momento. Tavares continuó en pista y no fue hasta su marcha al banquillo cuando Pasecnics aprovechó la pintura y Paulí los despistes defensivos. Seguía corriendo el equipo local con Carroll como principal correcaminos. Imparable también estaba Rudy, que terminaba con 11 tantos tras buenos minutos en el perímetro. También contaba con lucidez Randle e incluso Causeur, que ponía la puntilla a los ataques rápidos. El +14 fue obra de Doncic, que se calentó en los últimos dos minutos para redondear su despertar hasta los nueve de valoración. 53-36 y el partido se daba por cerrado.

A BASE DE GOLPES

El cuarto comenzó con Thompkins y Báez asumiendo la responsabilidad en ataque. Tanto en la pintura como en el triple, ambos se mostraron cómodos. Pero Granca necesitaba, además de acierto ofensivo, una defensa que frenase la facilidad con la que el Madrid llegaba al aro. No encontró fórmula correcta para ello. Para más inri, Seeley se las quiso dar de salvador para sacar a Doncic del partido. Sin embargo, todo lo contrario. Su agresión, aunque quedó impune en cuanto a sanción, provocó un arrollamiento por parte del esloveno. A la par que Doncic se animó el Madrid y con un parcial de peso impuso el 71-53 con el canterano como máximo anotador y 21 de valoración.

TRANQUILIDAD FINAL Y FIESTA EN LA GRADA

Volvió el Real Madrid a gustarse en los minutos finales. Las derrotas con minutos apretados quedaron atrás y los de Laso pudieron disfrutar de un cuarto entero sin apenas preocupaciones. Carroll y Maciulis aprovecharon el bajón defensivo visitante para lucirse desde el triple. Puro trámite. La grada tomó el protagonismo del partido y comenzó a repartir ovación a los que todavía no habían pisado la pista, así como a los lesionados. Laso hizo caso y sacó a pista a Radoncic y Yusta, que no habían tenido minutos todavía, y que demostraron estar a la altura anotando en muy poco tiempo. Jugadores y entrenador dieron la correspondiente respuesta a la afición y el Madrid volvió a sonreír.  A base de golpes, en el caso de Doncic literalmente, el conjunto merengue aprendió que las competiciones son muy largas. El liderato sigue siendo únicamente blanco con un balance de 9-1.

REAL MADRID 96-72 HERBALIFE GRAN CANARIA

Real Madrid: Campazzo (7), Doncic (16), Rudy (11), Thompkins (13), Tavares (8) -cinco inicial- Carroll (14), Yusta (2), Maciullis (3), Radoncic (3), Causeur (4), Randle (5), Reyes (10).

Entrenador: Pablo Laso.

Herbalife Gran Canaria:  Oliver (10), McKissic (2), Paulí (7), Báez (8), Balvin (5) -cinco inicial- Mekel (10), Seeley (11), Fischer (3), Pasecniks (4), Eriksson (12).

Entrenador: Luis Casimiro.

Árbitros: Pérez Pérez, Manuel, Sánchez Monserrat.

Parciales: 23-17 | 30-19 | 18-17 | 25-20

Incidencias: Partido correspondiente a la décima jornada de ACB que se disputó en el pabellón WiZink Center (Madrid).