Le aumentan los contendientes al Real Madrid. El club de Pablo Laso despierta temores en Europa fruto de sus últimas machadas y las bajas en sus rivales apresuran los días de recuperación para procurar plantar cara a los madridistas. Declaraciones desveladas por el medio Izvestia, anunciaban que el CSKA podría contar en sus filas con Kyle Hines, pívot norteamericano que se lesionó en el último encuentro de la fase regular en la Euroliga. De este modo, Hines no contaría con minutos en el Playoff ante el Khimki. 

Pese a que Dimitris Itouidis -entrenador del CSKA- puede suplir la baja de Hines con Othello Hunter, el '42' se antoja una pieza indispensable para el cinco inicial del equipo moscovita. El exmadridista puso rumbo al equipo ruso el pasado verano tras abandonar el Real Madrid. 

KYLE HINES

​"Prometo que jugaré la Final Four. Me siento mucho mejor y pronto me incorporaré del todo a los entrenamientos".

CONFIANZA Y CONVICCIÓN PARA LOS DE LASO

Sin embargo, si algo ha querido transmitir Pablo Laso de puertas hacia afuera, a parte de a sus jugadores, es la confianza ciega en su equipo para lograr un nuevo entorchado continental. Ganar la décima Euroliga supondría el broche de oro al más que posible adiós de Luka Doncic al vestuario que le hizo todo un nombre en el panorama baloncestístico mundial.

Parte de esta motivación radica en la extraordinaria ronda de Playoff que el Madrid cuajó ante un desquiciado Panathinaikos. El conjunto griego arrampló en el primer partido de la serie pero desgastó toda la gasolina que pudiera tener para el resto de la serie. El conjunto merengue se sobrepuso al varapalo inicial con un portentoso encuentro en el OAKA en el segundo partido. La eliminatoria en Madrid quedó vista para sentencia. Además, el buen rumbo que marcha el equipo en ACB hace que tanto el borrón en la Copa del Rey como las dichosas lesiones de principio de temporada hayan pasado a un segundo y tercer plano en importancia.